El Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) propone un recorte de 3,78% de su presupuesto. Para el 2016, la cartera solicitó ¢42.827 millones –0,54% del Presupuesto Nacional–.
Este viernes, ante la Comisión de Asuntos Hacendarios de la Asamblea Legislativa, la ministra Sylvie Durán y sus viceministros expusieron detalles del presupuesto. La reducción coloca al plan de gastos en un nivel similar al del 2014.
LEA MÁS: Ministra de Cultura niega que ¢4.900 millones de presupuesto sean para oficina del FIA
En total, se proyectan ¢1.683 millones menos que en el 2015, con una reducción importante en infraestructura del 37% (¢784,4 millones).
El rango de recortes en este rubro es de entre 10% y 25%, “según el tipo de entidad, su récord de ejecución e incorporación de otro tipo de fondos”, explicó Durán.
Sin embargo, Cultura espera contrarrestar esta disminución con una “utilización intensiva del superávit” del MCJ, que llega a ¢7.600 millones, para invertir en seis proyectos prioritarios.
Si la cartera logra las aprobaciones necesarias del Ministerio de Hacienda, con esto financiaría proyectos ya en proceso, se invertiría en el Centro Cultural de Barva, el Taller Nacional de Teatro y el Centro Nacional de la Música, entre otros.
Durán argumentó que la colaboración con otras instituciones para construir Centros Cívicos para la Paz y Parques Para el Desarrollo Humano permitiría seguir construyendo infraestructura cultural (pues la gran mayoría se concentra en la Gran Área Metropolitana).
La suma del presupuesto solicitado ante la Asamblea más el superávit le daría un gran total a Cultura de ¢50.520 millones para el 2016.
Más recortes. Otros de los aspectos que sufre fuertes disminuciones son las horas extra, que se recortarán en casi 80% y, las suplencias, que bajarán en un 47,14%. Subpartidas de gestión y apoyo se reducirán en casi 16% (¢266,7 millones); es decir, que habrá menos disponibilidad de tiempo y trabajo para poder realizar producciones del ministerio.
“Se trata de una reducción en las contrataciones de producciones de los programas presupuestarios: Dirección de Cultura, Sistema Nacional de Bibliotecas y Dirección General de Bandas.”, explicó el viceministerio administrativo por medio de un correo electrónico.
Entre los rubros cuestionados por los diputados en la comparecencia, destacó el aumento en alquiler de maquinaria y mantenimiento de equipo, que pasará de ¢16 millones a ¢270 millones.
Según el viceministro administrativo Dennis Portuguez, el año pasado se hicieron cálculos “errados” y se desconocían las necesidades reales de entes como el Centro de Producción Artístico y Cultural, puesto en marcha hasta el 2014.
También se le cuestionó a Cultura el crecimiento de hasta 25% en proyectos como el Parque La Libertad, que aún se encuentra en etapa de construcción.
Una reducción significativa afectará al Centro de Patrimonio (tendrá un 13,56% menos que en el 2015). “Va a haber menos obras que las habría si tuviéramos más presupuesto”, afirmó Durán.
Asimismo, bajarán los recursos para la Dirección de Cultura en un 17,48%, encargada de proyectos comunitarios, y el Museo Histórico y Cultural Juan Santamaría, de Alajuela recibirá un 22,68% menos que este año. Esto se debe a que su remodelación está casi completa, según Durán.
Dudas. El diputado Abelino Esquivel (Renovación Costarricense) consideró que el presupuesto para el MCJ en el 2016 era “demasiado alto” para la situación actual del país. Cuestionó que se solicitaran ¢1.249 millones marcados como “otros” y ¢1.686 millones para “mantenimiento de maquinaria”.
Los diputados Otto Guevara (ML) y Henry Mora (PAC) aprovecharon para cuestionar la cantidad de instituciones y programas bajo el mando de Cultura.
Guevara invitó a la ministra a plantear un proyecto de ley que reduzca la cantidad de órganos desconcentrados y “fortalecer” la rectoría de la ministra.
El diputado Rolando González (PLN) reclamó a Durán la impresión de un documento que resume la actividad del primer año de la Dirección de Cultura, la cual consideró como “publicidad”. La ministra lo refutó diciendo que era la rendición de cuentas del ente. Según González, tal acción contradice el código de ética del Partido Acción Ciudadana, un tema que ocupó varios minutos de debate entre los legisladores.
De forma polémica, Durán ordenó a sus subalternos no hablar a los medios acerca del presupuesto, como suelen hacer para defender las necesidades de su programa.
“La instrucción que pasé tiene que ver con ordenar la vocería”, aseguró la ministra, quien dice que fue algo conversado entre ministros, sin especificar quiénes ni aclarar si se trató de una orden de Casa Presidencial. Los diputados criticaron con dureza la “falta de transparencia” y la negativa a comunicarse abiertamente.