La Casona Iluminada celebra con cuentos el amargo espíritu antinavideño

La Casona Iluminada estrena el segundo año de su tradición antinavideña: Bulevar Sparkly reúne tres cuentos de personajes afectados por los malos momentos de la época

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Jesús entra a escena para contarnos que no todas las navidades brillan. Tras ser segundón de Santa Claus por décadas, finalmente toma el coraje para remercadearse frente al público de La Casona Iluminada como una estrella del ejercicio; ¿acaso no merece recibir toda la atención en su cumpleaños?

Fifí, una ama de casa obsesionada con el espíritu navideño, tiene otras intenciones: seducir a Santa Claus y, en su frenética obsesión se convierte en una historia similar al culebrón Atracción fatal (pero con un número musical en medio de su monólogo).

Los cuentos antinavideños nacieron para recordarnos que no todas las celebraciones decembrinas huelen a ciprés y saben a tamal. Si existen los ‘Grinch’ –como se les llama popularmente a quienes odian a la Navidad tanto como el personaje del cuento de Dr. Seuss– es por algo.

“La Navidad junta a las familias para hacerles daño, para sacar lo peor de ellas”, increpa la actriz española Zaida Rico en La amiga japonesa, el tercero de los monólogos que La Casona Iluminada estrenará hoy, a las 8 p. m.

La tradición de los cuentos antinavideños de La Casona, como otras tradiciones de la época, es importada. Es la segunda vez que el teatro josefino –ubicado en barrio Amón– recibe los vientos alisios con dramaturgia inédita.

En esta ocasión, estrenan obras de dos escritores costarricenses, Alejandra Marín y Estefan Esquivel, y una argentina, Maruja Bustamante.

La directora Natalia Mariño –ganadora del Premio Nacional de Teatro en la categoría de dirección para el año 2015– asumió la tarea de hilar la dramaturgia en un único espectáculo que lleva por título Bulevar Sparkly .

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Según explicó la productora Jennifer Monge, el nombre alude a lo que ella misma siente que representa la Navidad tica.

“Mi referencia más importante de la antinavidad es el bulevar lleno de escarcha. Uno va caminando por la avenida viendo personajes: uno no necesita salir de ahí para ver personajes propios de la Navidad”, detalla Monge.

Las funciones del montaje serán seis, de viernes a domingo, entre el 9 y el 18 de diciembre. El horario para las presentaciones de viernes y sábados será a las 8 p. m., y los domingos a las 6 p. m. Las entradas costarán ¢5.000.

Cuento de Navidad. Los primeros antinavideños se escribieron y se contaron en francés.

Hace más de 20 años, el dramaturgo canadiense Yvan Bienvenue creó la tradición de escribir “cuentos urbanos” para llevarlos a escena durante Navidad.

El estilo de Bienvenue nació como un híbrido: mitad monólogo teatral y mitad narración oral; mitad guion poético y mitad diatriba; un poquito de amargura y otro poquito de humor cínico.

La migración artística lentamente sacó el estilo de Montreal.

Para el 2004, el canadiense Boris Schoemman llevó el concepto a la Ciudad de México y comenzó a producir un concurso de dramaturgia desde el Teatro La Capilla.

Hasta la fecha, el grupo teatral monta los textos y, además, publica los guiones en libros.

En la edición del décimo aniversario de la tradición mexicana, La Capilla estrenó su primer texto por una tica, X_X Santa , escrita por Jennifer Monge.

“Yo vine primero como artista independiente para los antinavideños”, cuenta Monge sobre su primer contacto con La Casona Iluminada, en el 2015 , cuando volvió para radicarse en Costa Rica.

En esa primera edición “tropical”, el montaje incluyó el texto de Monge. Para el segundo año, ahora como productora de tiempo completo dentro de La Casona, la artista vigila su gestación.

“Lidero la producción los antinavideños pero tengo apoyo de Carolina Lett con las cosas de arte, Esteban Alfaro-Moscoso me ayuda con escenografía, redes sociales, dramaturgia”, explica Monge sobre el trabajo durante Bulevar Sparkly.

Comedia negra. ¿Por qué odiar la Navidad? Sin hilar muy fino, sobran justificaciones para hacerlo: las calles llenas de compradores compulsivos, los adornos “polos”, la mala convivencia familiar, la mezquina competencia entre quién adorna más y mejor la casa o quién está pasando el mejor rato en una fiesta.

Precisamente, en el monólogo INRI de Alejandra Marín aborda la infecciosa necesidad de ser popular en Navidad con un personaje que, en teoría, es el más popular durante las celebraciones cristianas.

“Jesús está desesperado por obtener la atención de los millenials y recuperar el lugar que Santa le quitó en la Navidad. Como el mae tiene tanto tiempo de estar lejos de las canchas y lo han relegado a estar como recién nacido o recién crucificado, se reinventa y quiere mostrar una imagen más joven”, describe el actor Zebastián Méndez quien interpreta a un Jesús que hace flexiones con su cruz para sacar cuadritos.

Monge cuenta que reclutaron a Marín y a Estefan Esquivel por medio de los talleres de dramaturgia que ofrece La Casona Iluminada al sector escénico.

A nivel de producción, los antinavideños exponen los valores máximos de cómo trabaja el pequeño teatro josefino: un trabajo escénico íntimo, la colaboración entre actores independientes del sector y, sobre todo, una apuesta arriesgada en estilos y temas.

“¿Hasta qué punto llega el consumismo? ¿Hasta qué punto llegamos a adorar personajes que hemos creado para ese sentido? ¿Navidad no sería Navidad sin Santa Claus?”, cuestiona el actor Alonso Chaves sobre las motivaciones de su personaje, Fifí, en el texto de Esquivel, El regalo perfecto. “Es un personaje que se muere y se desvive por Santa Claus. Básicamente, desde niños nos lo meten, es un personaje que hemos tenido muy cercano en nuestra vida”.

Estas dos primeras historias sientan el tono para Bulevar Sparkly : amargo porque ninguna de las historias son agradables pero, finalmente, cómicas porque es casi inconcebible que alguien pueda pasarlo tan mal durante las últimas semanas del año.

“Es cierto, esto está en un lugar diferente de los otros dos monólogos”, explica la actriz Zaida Rico sobre La amiga japonesa .

El cierre del montaje es un recorrido melancólico por una amistad truncada por la mala suerte en las vísperas navideñas. Su dramaturga, la argentina Maruja Bustamante, explota el cinismo con una historia explícitamente triste. “Es un regustito oscuro del final. Empezamos muy arriba y con esta pieza caemos en picado”, dice Rico.

El gusto agridulce resume bien al espíritu antinavideño.

“Me cago de risa siempre”, confiesa la directora, Natalia Mariño. “Yo sé que como espectadora la pasaría bien. El proceso ha sido satisfactorio y me he reído mucho. Los textos eran muy poderosos, tenían bastante carga. Realmente, lo que hicieron los escritores nos daba mucho”.

La estimulación a la creación dramatúrgica es otro de los valores agregados de los antinavideños. La versión mexicana de la tradición imprime los textos y, en ocasiones especiales, ha remontado algunas de las piezas.

El plan de Monge es, a futuro, replicar ese modelo de publicación en Costa Rica: poder contrastar año con año el espíritu meloso de la Navidad con la acidez del espíritu antinavideño.

La Casona Iluminada, ubicada 120 metros oeste de la Alianza Francesa en San José, ofrece funciones de los cuentos antinavideños Bulevar Sparkly desde el 9 y hasta el 18 de diciembre. Las presentaciones de viernes y sábado serán a las 8 p. m. y los domingos a las 6 p. m. Las entradas tienen un costo de ¢5.000.

Otras obras navideñas

Un cuento de Navidad

Teatro Espressivo (Pinares de Curridabat). El montaje Un cuento de Navidad, adaptación de la obra de Charles Dickens, tiene funciones hasta el 18 de diciembre con una función especial el domingo 25 de diciembre. Dirigida por Carlos Salazar, la obra cuenta la historia de un hombre avaro que debe confrontar el pasado, el presente y el futuro de sus decisiones en un viaje lleno de música y personajes curiosos. Las funciones son los viernes y sábado, a las 8 p. m., y los domingos, a las 4 p. m. y 7 p. m. El costo de las entradas es de ¢9.000 en general y ¢12.000 vip. Para reservaciones puede llamar al número 2267-1818 o comprar sus entradas en el sitio http://boleteria.espressivo.cr

El Cascanueces

Teatro Popular Melico Salazar (San José). El ballet clásico dirigido por Patricia Carreras cuenta la historia de Clara, una joven arrojada a la aventura en un mundo mágico de copos de nieve, caramelos y un malvado ejército de ratones que deberá enfrentar junto a un Cascanueces. Las coreografías utilizan la música clásica del compositor ruso Piotr Chaikóvski. Las funciones son hasta el domingo 11 de diciembre. Este viernes la función será a las 8 p. m. El sábado habrá una función a las 3 p. m. y otra a las 8 p. m. El domingo tendrán una matiné a las 11 a. m. y una función de cierre a las 6 p. m. Los precios oscilan entre los ¢19.000 y los ¢32.000. Se pueden adquirir al número 2428-28778 o en puntos de venta digital o físicos de SpecialTicket.

Alicia en el País de las Maravillas

Teatro Nacional (San José). Este año, el Teatro Nacional coproduce junto con la academia de baile Danzay y el Sistema Integral de Formación Artística para la Inclusión Social (Sifáis) una versión en ballet contemporáneo de la obra de Lewis Carroll. La adaptación de María Amalia Pendones sigue a Alicia mientras recorre un mundo fantasioso en el que las cosas no son lo que parecen y una cruel dictadora amenaza con descabezar a quien no siga sus órdenes. Las funciones son hasta el 18 de diciembre. Este viernes tendrán una presentación a las 8 p. m.; el sábado tendrán dos en horarios de 3 p. m. y 8 p. m.; el domingo 11 tendrán una a las 11 a. m. y otra a las 6 p. m. Las entradas tienen un costo entre los ¢8.000 y ¢30.000.