Sam Mendes, un favorito con cuatro ‘monstruos’ al acecho

En la rama de mejor director, el realizador de ’1917′ aparenta tenerlas todas consigo. Sin embargo, con Martin Scorsese, Quentin Tarantino, Tood Phillips y Bong Joon-Ho a su lado, no muchos se atreven a asegurar su Óscar

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Si hace un par de meses uno se hubiera dejado vencer por la ansiedad, parecía seguro apostar por Martin Scorsese como el ganador del Óscar a mejor director. El irlandés, después de todo, es el cierre perfecto a una carrera que definió el cine americano de los últimos 50 años y una reflexión concluyente sobre el papel de la violencia en la sociedad estadounidense con De Niro, Pacino, Pesci, Keitel. Scorsese sabe cómo contar esa historia y el porte de El irlandés tiene lo necesario para darle a Scorsese, su segundo Óscar.

Por las dudas, incluso uno podría haber apostado por Quentin Tarantino, quien demostró el mismo poder de síntesis de su cine y de la industria en Había una vez en Hollywood. Después de todo, se podría pensar que ya le tocaría, pues los dos Óscar que ganó Tarantino fueron por sus guiones (Pulp Fiction y Django sin cadenas ) y esta sería su tercera nominación como director. La película, además, es una autocelebración de un cine en transición y, aunque esté ambientada al final de la década de 1960, parece estar hablando de transiciones más actuales. Tiene a Brad Pitt y a Leonardo Di Caprio y es un recordatorio de lo relevante que sigue siendo el cine como arte y espectáculo.

Pero la vida, como las películas, está llena de imprevistos y hoy todo indica que Sam Mendes tiene, con 1917, lo que se precisa para ganar su segundo Óscar, 20 años después de conquistarlo por Belleza americana. El domingo pasado el británico ganó como mejor director en los premios Bafta y su favoritismo se vio apuntalado. Antes había ganado el Globo de Oro en su rubro, así como también ganó los premios del Sindicato de Productores y los del gremio de Directores, un paso previo que comparten los cineastas que ganaron los últimos cinco Óscar de la categoría.

Está claro que los reconocimientos son merecidos. 1917 es un peliculón: la trama cuenta -con un aparente plano secuencia-, la misión suicida de dos soldados en la Primera Guerra Mundial que tienen que hacer llegar un mensaje para salvar de la muerte a unos 1.600 hombres. Es cierto que muchos de los méritos de la cinta están compartidos por Mendes con su director de fotografía (Roger Deakins) y su editor (Lee Smith), pero está claro que una película así necesita un director fuerte, decidido y con el talento para lidiar con tantos frentes artísticos abiertos.

Además de Tarantino y Scorsese, el quinteto de nominados lo completan el coreano Bong Joon-Ho, por Parasite, y el estadounidense Todd Phillips por Joker.

Algunas apuestas dan como segundo favorito a Bong Joon-Ho, de Parasite. En los Critic’s Choice el director surcoreano compartió el premio a mejor director con Mendes y, su película, ha sido saludada por la crítica desde que se estrenó en el Festival de Cannes, donde conquistó la Palma de Oro.

Lo de Todd Phillips, por Joker, no se vislumbra como una posibilidad. No es que Todd lo haga mal, para nada, es que los méritos de la cinta más rentable del año pasan por otro lado: la actuación de Joaquin Phoenix y el conseguir captar cierta coyuntura social que se ve urgente. Es una película muy Scorsese, en todo caso, lo que sería una ironía si llegara a ganarle a su maestro.

Las de Mendes, Tarantino, Bong Joon-Ho, Scorsese e incluso la de Phillips son direcciones de las que se hacen notar y esa sería la razón por la que no estén nominados Greta Gerwig, por esa maravilla llena de sutilezas que es Mujercitas, o su esposo, Noah Baumbach, por Historia de un matrimonio, una lección de un cine rico aunque austero.

Pero la Academia ha preferido, como siempre, lo más evidente a lo más silencioso. Y por lo visto lo masculino: una vez más no hay ninguna directora nominada, a pesar de que el año pasado fue un gran año para las mujeres en el cine.

En resumen, la mayoría de apuestas darán a Mendes el Óscar, y todo indica que tienen razón, pero en la vida y en las películas, insistimos, todo puede pasar. Al menos en esta categoría, habrá que esperar hasta el último minuto.

Las joyas de los cineastas

-1917

Director: Sam Mendes

-El irlandés

Director: Martin Scorsese

-Había una vez en Hollywood

Director: Quentin Tarantino

-Parasite

Director: Bong Joon-Ho

-Joker

Director: Todd Phillips