No solo Bruce Wayne vistió la capa de Batman

Sucesores El trillonario de Ciudad Gótica se vio obligado por los hechos a ceder su trabajo en un par de oportunidades

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Llevar la capucha de Batman es una carga pesada, muy pesada: no es cosa sencilla defender a su ciudad de los peores criminales, lamentablemente excepcionales en sus retorcidas habilidades.

A lo largo de 75 años de historia, Bruce Wayne, el álter ego del paladín, tuvo que ceder su lugar, capa y máscara, básicamente, obligado por las circunstancias.

Sin embargo, el multimillonario siempre regresa como Batman a Ciudad Gótica, cuya noche deber ser la más peligrosa de todo el planeta..., y lugares vecinos.

En tres cuartos de siglo, los diversos escritores han revisado, actualizado, adaptado y rebobinado el universo del murciélago.

Tal es la razón por la cual se explica que haya habido más de un hombre con la máscara del llamado detective más grande del mundo.

Debajo de la máscara. Al inicio de la década de los años 90 sucedió lo impensable: Bruce Wayne cedió su trabajo como Batman; peor aún, lo hizo porque el nuevo villano Bane le quebró la espalda y lo dejó lisiado en una silla de ruedas

Jean-Paul Valley fue el escogido para llevar la capa de Batman. Bruce Wayne quedó satisfecho, al principio, con los resultados de su heredero en la lucha contra el crimen; sin embargo...

Valley –conocido como Azrael– se convierte en un Batman despiadado y violento, que provoca que Bruce Wayne acelere su recuperación, algo que logró con métodos paranormales.

Finalmente, como era de esperarse, vence a Valley y recupera su sitio como Batman; pero no se queda del todo y Dick Grayson (el primer Robin) tomará su lugar, mientras Wayne se termina de curar.

No será la única vez que Grayson se ponga en los zapatos del Caballero de la Noche.

Regreso del más allá. A finales del primer decenio de este siglo y principios de esta década, Batman fue asesinado.

A regañadientes, y tras ganar la disputa entre los allegados del murciélago por el derecho a la sucesión, Grayson toma el trabajo.

Se revela como un encapuchado con mayores medios en el delicado quehacer de capturar supervillanos; una tarea en la que es acompañado por Damian Wayne (hijo de Bruce Wayne, para más señas).

Como suele suceder en el mundo de las historietas, la muerte no es necesariamente definitiva.

El deceso de Batman fue solo aparente y el cuerpo que apareció era el de un clon.

Mientras se le creyó fallecido, resultaba que su conciencia andaba vagando por mundos paralelos y pasados distantes.

Finalmente, Batman regresa a este mundo, para darse cuenta de que a Dick Grayson y Damian Wayne no les ha ido nada mal como los nuevos paladines de la justicia de Ciudad Gótica.

Sin embargo, en el mundo de los cómics, nada suele ser eterno.

Con el nuevo universo de DC (la casa editora del superhéroe), llamado The New 52 , Grayson cede, de nuevo, el manto de Batman a Bruce Wayne, su legítimo dueño.

Así Bruce Wayne/Batman vuelven a ser uno solo en Ciudad Gótica y su lucha contra el crimen... Al menos, hasta la próxima reinvención de la historia.