Todo el mundo se acuerda de Neil Armstrong, el primer hombre en pisar la Luna, o de John Glenn, el tercer estadounidense en volar al espacio.
A estos hombres de tez blanca y ojos claros la historia los ensalza como héroes; sin embargo, cualquier persona con un miligramo de inteligencia sabe que sus hazañas jamás las pudieron alcanzar solos.
¿Quién o quiénes estuvieron detrás de sus portentosos y recordados logros?
Lo que Talentos ocultos (Hidden Figures, 2016) le revela puede que le sorprenda.
Nominada a tres Óscar de la Academia –incluyendo mejor película, mejor guion adaptado y mejor actriz de reparto (Octavia Spencer)–, Talentos ocultos esculpe en el cine la historia de tres sorprendentes mujeres afroamericanas.
Se trata de Katherine G. Johnson, encarnada por la actriz Taraji P. Henson; Dorothy Vaughan, a quien da vida la nominada Spencer, y Mary Jackson, interpretada por Janelle Monáe.
Las tres eran brillantes mujeres científicas, expertas en el área de matemáticas, quienes trabajaron en la NASA a comienzos de los años 60.
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Es decir, fueron pilares fundamentales de la famosa carrera espacial que enfrentó con furia a Estados Unidos y la antigua Unión Soviética.
Las mujeres eran, según las notas de producción de la película, “computadoras humanas” cuyos roles fueron fundamentales para que el ser humano conquistara las estrellas.
Lo más interesante de esta historia –dirigida por Theodore Melfi y basado en el libro homónimo de la escritora Margot Lee Shetterly–, es que las protagonistas alcanzaron tales logros en medio de una cruenta lucha por los derechos civiles de los negros en Estados Unidos.
“Esta historia se desarrolla en medio del conflicto de la Guerra Fría, la carrera espacial, las leyes de Jim Crow y el nacimiento del movimiento de los Derechos Civiles. Es un territorio increíble para una historia espléndida, muy poderosa, que muy poca gente conoce en su totalidad”, dijo Melfi, muy orgulloso de su película.
Momento clave. Talentos ocultos tiene como línea argumental los aportes de las mujeres protagonistas al lanzamiento del astronauta John Glenn al espacio. Para orbitar la Tierra, tal como lo hizo en 1962, necesitó los cálculos de estas mentes brillantes.
Glenn, a bordo del Friendship 7, completó tres órbitas a nuestro planeta, con una duración de 4 horas 55 minutos y 23 segundos.
El logro de Glenn, celebrado con desfile militar y todo, fue la mejor respuesta de Estados Unidos al golpe perpetrado por la Unión Soviética, que en 1958 había lanzado el satélite Sputnik y con ello ganado puntos en la llamada Guerra Fría.
Pero las estrellas de Talentos ocultos, junto a todo el programa espacial impulsado por el presidente John F. Kennedy, iban a tener la última palabra.
“Todos nuestros ingenieros estaban furiosos que alguien más lo haya hecho primero (en referencia al Sputnik). Pero lo que la mayoría de la gente no sabe era que estábamos justo detrás de los rusos y estábamos listos para cualquier cosa”, expresó la Katherine G. Johnson de la vida real.
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Tanta era la necesidad de Estados Unidos por dar un paso al frente, que las distancias raciales se hicieron a un lado y no dudaron en echar mano de aquellas genios de piel oscura.
“Para la NASA, en aquella época, la inteligencia era más importante que la raza o el sexo. Estas eran mujeres brillantes que podían hacer las matemáticas que necesitaban, que estaban hambrientas por una oportunidad, que querían cambiar sus vidas... así que, ¿a quién más iban a recurrir?”, recordó Melfi en las notas de producción de la película.
En la película es Al Harrison, personaje encarnado por Kevin Costner, quien da el voto de confianza a las estrellas del relato. Él trabaja en la NASA y es el líder de la complicada misión.
Atravesando esa puerta, abierta como nunca antes, Katherine, Dorothy y Mary pudieron aplicar sus conocimientos y dar rienda suelta a sus pasiones. Al final, las tres mujeres se volvieron indispensables en los logros espaciales y se ganaron el respeto de todos.
“Sabemos que EE. UU. fue erigido por la habilidad de gente extraordinaria, pero esta gente que dio tanto no siempre ha recibido la atención pública que se merece”, dijo Costner en las notas oficiales del filme.
“Quizás los nombres de estas mujeres no estén por todos lados, pero fueron de gran relevancia para el programa espacial y para la vida de la gente real”, finalizó el actor.
Talentos ocultos se exhibe en todos los cines del país y es apta para todo público. La película ganó el premio al mejor elenco en los premios SAG.
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