Critican a Quentin Tarantino por abusar de un insulto racista en sus películas

Refiriéndose a la ‘n-word’, utilizada para insultar a los afroamericanos, el guionista de ’12 años de esclavitud’ dijo que el cineasta se “deleita” utilizándola.

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John Ridley, guionista del filme 12 Años de esclavitud y autor del artículo de opinión que pidió el retiro de Lo que el viento se llevó de HBO Max, criticó fuertemente a Quentin Tarantino.

Según Ridley, en casi todas sus películas, Tarantino suele abusar de la palabra “n-word”, que se utiliza para insultar a la población afroamericana.

“Es doloroso y es exasperante”, afirmó Ridley, agregando que “de alguna manera, (Tarantino) se deleita con la palabra”.

De acuerdo con un recuento de Dallas Observer, realizado en 2019, Tarantino utilizó la palabra “N-word” al menos 214 veces en sus producciones fílmicas, siendo Django sin cadenas la cinta en que más veces apareció el término.

Según recordó Daily Mail, esta no es la primera vez que Tarantino ha recibido críticas por la utilización del insulto racista en sus películas. En el pasado, también fue recriminado por Spike Lee, específicamente por la cinta Jackie Brown.

“Creo que algo está mal con él. Está enamorado de la palabra. Quiero que Quentin sepa que los afroamericanos no creen que esa palabra esté de moda”, señaló Lee.

Tarantino ha defendido el uso de la “n-word” en sus películas, asegurando que no se puede pensar que “el color de la piel de un escritor debería tener algún efecto en las palabras mismas”.

Asimismo, el cineasta ha recibido el apoyo de actores afroamericanos como Jamie Foxx y Samuel L. Jackson, quienes se han manifestado de acuerdo con el uso del término. Ambos intérpretes consideran que, si el contexto lo justifica, no hay ningún inconveniente en utilizarla.

Hasta el momento, el director no ha respondido a las últimas críticas de John Ridley, aunque no sería extraño que lo haga en los próximos días.

Los alegatos de Ridley llegan en un contexto muy particular: las protestas por asesinato del afroamericano George Floyd a manos de un policía blanco. El crimen no solo despertó una ola de protestas en las calles, sino también una presión mediática poco habitual en los medios de comunicación.