Instagram anunció la puesta en práctica de medidas drásticas en su política de imágenes referentes a las autolesiones, luego de que una adolescente británica, que seguía cuentas relacionadas con el suicidio, se quitara la vida.
La decisión de aplicar estas acciones nació luego de una reunión celebrada el jueves entre Adam Mosseri, jefe mundial de Instagram y Matt Hancock, secretario de salud británico.
El caso de la joven de 14 años llamada Molly Russell, quien se suicidó en el 2017, provocó un debate en Reino Unido en torno al control de los padres y la regulación estatal del uso que hacen los menores de edad de las redes sociales.
"Es alentador ver que ahora se están tomando pasos decisivos para tratar de proteger a los niños del contenido perturbador en Instagram. Ahora es el momento de que otras plataformas tomen medidas ",comentó Ian Russell, padre de Molly.
Por su parte, los padres de la joven no culpan directamente a la red social, sin embargo se refirieron al sencillo acceso a este tipo de publicaciones, como un factor contribuyente.
Mosseri aseguró que los cambios se realizaron luego de una revisión exhaustiva por parte de expertos y académicos en temas de salud mental en niños.
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“Me uní a la compañía hace más de 10 años y nos centramos principalmente en todo lo bueno que resultó de conectar a las personas. Pero si soy honesto, no nos enfocamos en los riesgos de conectar a tanta gente. Esa es una lección que hemos aprendido en los últimos años”, explicó Mosseri al periódico The Telegraph.
Entre las medidas tomadas por la red social, se encuentra la eliminación de todo tipo de referencias a contenido no gráfico relacionado con personas que se lastiman a sí mismas, además de la prohibición de los hashtags relacionados con la autolesión.
El objetivo de esta decisión es dificultar la búsqueda de este tipo de imágenes para los adolescentes con tendencias suicidas.
“No estamos eliminando este tipo de contenido de Instagram por completo. No queremos estigmatizar o aislar a las personas que puedan estar en apuros y publicar contenido relacionado con autolesiones como un grito de ayuda”, concluyó Mosseri