A pesar de que el Congreso Mundial de Móviles (MWC por sus siglas en inglés) apenas comenzó en Barcelona este lunes, las principales novedades en cuanto a tecnología móvil se revelaron previamente, durante el lanzamiento del nuevo Galaxy Fold de Samsung el pasado miércoles 20 de febrero y este domingo 24, con el anuncio de Huawei de su teléfono plegable.
Esa parece ser la nueva tendencia que tratan de imponer estos fabricantes para reactivar el mercado de los celulares.
Aunque los dispositivos apenas han sido vistos a través de una vitrina y rozado pocas manos de periodistas de medios especializados, este tipo de tecnología ya ha dado de qué hablar, sobre todo por su elevado precio.
El Galaxy Fold costará $1.980 dólares, poco más de ¢1.200.000, mientras que el Mate X, el smartphone plegable de Huawei costará $2.600, cerca de ¢1.580.000.
“Por ahora, parece una solución a un problema inexistente. La mayoría de los consumidores pensará que es muy costoso. Es un producto que está aún en una fase temprana”, dijo Ben Wood, analista de la asesoría de tecnología CCS Insight, a la agencia de noticias AFP.
Muchos analistas también se preguntan por la resistencia de los teléfonos, toda vez que las zonas de pliegue suelen generar problemas en los aparatos electrónicos con el paso del tiempo.
“Hasta ahora, la tendencia ha sido garantizar un diseño que evite los elementos mecánicos en un ‘smartphone’, para hacerlos más duraderos”, señala Ian Fogg, analista senior en OpenSignal, empresa que recopila y analiza información de redes de telefonía móvil.
Según un análisis de IDC, las ventas de celulares cayeron 4,1% hasta las 1.400 millones de unidades en el 2018, debido a que la gente tarda más en reemplazar sus aparatos por las pocas innovaciones.
Sin embargo es un poco pronto para prever que serán los teléfonos plegables los que devolverán dinamismo al mercado de los móviles, ya que según CCS Inshight serán dispositivos de nicho hasta el 2022.