‘Selección’ colegial de Costa Rica parte a feria mundial de Intel ISEF

Ticos llevan ideas para cuido de cacao y yuca y afilamiento de equipo médico

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

San José

Once colegiales divididos en cinco proyectos de ciencia y tecnología.

Esa es la ‘selección’ que representa al país en la Feria Internacional de Ciencia e Ingeniería Intel Isef 2014; mayor concurso jóvenes para promesas que convoca a siete millones de concursantes cada año.

A esta edición, con sede en Los Ángeles (EE. UU.), acuden 1.600 jóvenes de 70 países clasificados para medirse en 14 categorías posibles durante toda la otra semana.

La delegación costarricense presentará un afilador mecánico para pines ortopédicos, un método más ahorrativo para la producción de grafeno y un fungicida natural que cuida cultivos de cacao.

También se exhibirá un procedimiento que preserva plantas de yuca criadas en vitro en su paso del cristal a la tierra y un sistema de señalización para asfalto de carreteras a base de luces y sensores.

Los proyectos se eligieron en diciembre en el Costa Rica ISEF Challenge que organizó la Corporación Intel y el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones.

Ingenio que ahorra y sirve. En esa oportunidad, el jurado escogió a María Luisa Ortiz y María Fernanda Ramírez del Colegio Técnico Profesional Don Bosco por su máquina que afila pines utilizados en intervenciones quirúrgicas en el Hospital Nacional de Niños.

Al presentarse ayer la delegación que parte el fin de semana a EE. UU., ambas explicaron que su invento baja de doce a dos los minutos para afilar puntas metálicas; proceso que antes se hacía a mano.

Ya en uso en el hospital, el aparato no solo automatizó el proceso, sino que el afilado es más exacto.

Roberto Delgado y Brandon Montero, del Colegio Técnico Profesional Monseñor Sanabria, crearon un atajo químico para producir grafeno de forma más barata.

El grafeno es la sustancia más dura y resistente que hay: resiste 200 veces más que el acero y es muy flexible e incluso sirve para producir baterías que pueden cargarse en lapsos cortos y proveer más tiempo de carga.

Delgado y Montero crearon un nuevo método para su obtención utilizando grafito; como el de las puntas de los lápices.

Con una máquina prototipo de $3.000 de valor (las máquinas comunes para crear grafeno superan los $200.000), los jóvenes crean láminas de 98 centímetros de longitud por un valor promedio de $35. La misma lámina en el mercado, cuesta más de $3.800.

Laura Campos Quesada y Juan Manuel Segura Castro, del Colegio Científico de Costa Rica (sede de San Carlos) crearon un método que eleva la tasa de sobrevivencia de plantas de yuca germinadas en vitro cuando estas se pasan a tierra.

Hallaron que, aplicando dióxido de carbono y sacarosa al cultivo in vitro, las plantas sobrevivían más al pasar del laboratorio a terreno.

Siempre en el reino vegetal, Daylin Bryan, Verónica Bustos y Marcelo Guerra, del Liceo Académico de Sixaola, crearon un fungicida natural contra el hongo causante de la monilia; enfermedad que ataca las mazorcas del cacao.

Su fermento biológico, creado a partir de mazorcas sanas, redujo 97% la incidencia del mal en una plantación sometida a prueba.

El último proyecto concursante también es preventivo pero de accidentes y congestiones viales.

Paulo Díaz y José David Porras idearon un aparato parecido a los “ojos de gato” en las vías del país. Su prototipo, sin embargo, emite sus luces que cumplen funciones de carril reversible y alerta al conductor el cambio de luz en el semáforo metros antes de este e incluso podría alertar de deslizamientos a las autoridades.

Son 11 jóvenes y cinco proyectos pero a Los Ángeles también se van cientos de horas de trabajo y apoyo de familias e instituciones.