San José.
Si usted visita la feria Expomóvil, verá poca novedad tecnológica. La excepción es un carro a control remoto que sí atrapa la curiosidad de los peatones en el sitio.
Es el sedán F5 del fabricante chino BYD. Solo es nuevo en Costa Rica, porque desde el 2012 la empresa lo ofrece en otros países.
Su control remoto tiene un panel con flechas para mover el carro hacia delante y para atrás, así como girar sus llantas con el chofer fuera de la cabina, guiando la operación.
Este diario probó el asistente para estacionar del F5, el miércoles, durante una visita al campo ferial.
A 10 metros del carro, se oprime un botón y el F5 se desplaza a tres kilómetros por hora; como alguien que camina sin prisa. Al soltar el botón, se detiene en el acto. Se oprime otro botón y las llantas y el volante giran al gusto.
Al utilizarlo, el control también atrajo a curiosos que detuvieron su paso para observarlo y registrar en sus teléfonos el video de rigor.
Silvia Sibaja, del área de Ventas de BYD, dijo que el control remoto tiene un alcance de 80 metros.
El F5 cuesta $28.500 y posee tres cámaras (una trasera y dos laterales), un visor en el panel del conductor y cuatro sensores de proximidad. Con tanto ojo electrónico, es casi imposible golpear la carrocería en la rutina de estacionarlo.
Instructor de manejo. Otra curiosidad la exhibe Fiat con su eco: Drive, una suerte de instructor de manejo de su sistema digital Blue and me.
Lanzado hace años, Blue and me es un programa creado por Microsoft para Fiat para dictar órdenes en el carro que controlen sus funciones. Similar a lo que ofrecen otros fabricantes automotrices.
Sin embargo, lo que eco: Drive propone sí es diferente, pues evalúa los estilos de conducir.
Lo hace acumulando datos de velocidad, cambios de marcha, frenado y consumo de combustible, que luego se evalúan y se presentan como gráficos e información, para mejorar la conducción.
“Esto genera ahorro y menos emisiones”, explicó Francisco Brenes, gerente de Servicio de Fiat.
La Nación probó el sistema en un Fiat 500 C, que trae puerto USB.
Primero se descarga la aplicación eco:Drive del sitio fiatecodrivefleet.com a una computadora. Luego se coloca una memoria USB en el puerto del vehículo.
Al conducir el Fiat 500 C, Blue and me pasará automáticamente los datos de cada desplazamiento a la memoria USB. Luego, al conectar el dispositivo a la computadora, eco:Drive elaborará el análisis.
El sistema calcula, a un año plazo, cuánta gasolina se gastará al estilo de conducir actual y también ofrecerá una alternativa anual más ahorrativa con prácticas virtuales, sugerencias y tutorías en video.
Más de lo mismo. Fuera de estos dos exponentes, lo exhibido repite trucos como más bolsas de aire para seguridad o conexión por Bluetooth entre teléfonos y carros para mensajería o gestión de llamadas.
Carlos Aguilar, de la Asociación de Importadores de Vehículos y Maquinaria (que organiza Expomóvil), culpa a la menor calidad de los combustibles locales el que los fabricantes envíen hacia Costa Rica modelos con menos tecnología.
“Se debe a una mezcla entre criterios de calidad y pautas de mantenimiento vigiladas por las marcas. Esto influye”, dijo Aguilar.
Otra razón son los precios. Los vehículos con cámaras externas o sensores de cercanía son habituales en mercados grandes y maduros. En Costa Rica no y eso se cobra. Un ejemplo: el sedán híbrido Toyota Camry CH10 cuesta $47.900 en la Expomóvil. En la página de Toyota de EE. UU., el modelo Camry más sofisticado y costoso, el XLE, se ofrece por menos de $29.000.