Una venezolana, quien estaba embarazada, y su esposo, de nacionalidad egipcia, aseguran que ella perdió al bebé por falta de atención médica mientras estaban en el Centro de Aprehensión de Extranjeros en Tránsito, en Hatillo, San José.
La extranjera fue identificada como Marilyn Molina Cano y su pareja como Mohamed Abdel Sager.
De acuerdo con su queja, ambos ingresaron el 9 de enero al centro de reclusión por encontrarse en condición migratoria irregular.
Supuestamente, desde ese momento, la mujer presentó dolores y, por ello, solicitaron ayuda a los funcionarios, pero no fue atendida.
Al parecer, la apresada fue valorada hasta el lunes 11 de enero por la médica de Migración y, posteriormente, en el Hospital San Juan de Dios, donde le informaron que perdió al bebé.
Por este caso, el jueves, y luego de una publicación del Diario Extra , la Defensoría de los Habitantes solicitó a la Dirección General de Migración que, en un plazo de cinco días, remita un informe en el que indique si el centro “cuenta con un protocolo que garantice atención médica de calidad a las mujeres embarazadas”.
La misiva también pide detallar cuáles son las directrices emitidas a los custodios para los momentos en que no se encuentre la doctora.
Además, la Defensoría consultó si se abrió una investigación por lo ocurrido.
En curso. Este lunes, la directora de Migración, Kathya Rodríguez, manifestó a La Nación que ya había ordenado una pesquisa y remitió el informe a la Inspección Policial del Ministerio de Gobernación para que determine si hay responsabilidades.
La jerarca detalló que tanto la venezolana como su compañero fueron detenidos cerca de Peñas Blancas, en la frontera norte.
Rodríguez explicó que la única doctora del centro de aprehensión no labora los fines de semana, pero que se mantiene disponible para emergencias.
Asimismo, señaló que las personas con algún malestar deben ser referidas a una clínica.
Rodríguez expresó que la versión de algunos oficiales es que desconocían que la mujer tuviera algún dolor. “Tengo dichos contrapuestos. En principio, dicen que no se sabía que se sintiera mal”, comunicó la directora.
No obstante, manifestó que será la Inspección la que aclare si fue de esa manera.
La conclusión de ese órgano será enviada al Consejo de Personal, el cual tiene potestad de ordenar suspensiones de hasta 30 días. En caso de que se considere que procede un despido, se remite la recomendación al ministro de la cartera para que tome una decisión.
Solicitud de refugio. La directora de Migración también detalló que la venezolana salió del hospital el sábado pasado.
Añadió que tanto la mujer como su compañero solicitaron refugio en el país.
Mientras se resuelve esa gestión, la extranjera fue trasladada a un albergue, Por otra parte, el egipcio se mantiene en el centro de reclusión.