Limón. El sábado anterior atracó en Limón el primer barco de la temporada de cruceros con 653 turistas a bordo.
La embarcación arribó a una ciudad que apenas se repone de dos tiroteos, ocurridos a plena luz del día, en sitios públicos y con un saldo de cinco personas fallecidas y seis heridas.
Para controlar la delincuencia, la Policía se vio obligada a enviar 200 oficiales a Limón.
No obstante, la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) considera que estos hechos no afectarán el comportamiento de los turistas durante su estancia en el Caribe costarricense.
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Sharon Jones, jefa de Promoción del Desarrollo de Japdeva, señaló que los conflictos se han dado en sitios que no son frecuentados usualmente por los visitantes.
“Lo que se está dando es un asunto de guerra entre pandillas, no es la primera vez que se dan estas situaciones. No quiero decir que eso está bien, pero con las navieras hemos tenido una comunicación muy abierta y les hemos dado la seguridad de que hay buenas condiciones de seguridad para los turistas“, comentó Jones.
Agregó que desde hace tres años mantienen una comisión de seguridad integrada por varias instituciones y garantizó que están preparados para atender a los viajeros.
En el grupo de trabajo participan Seguridad Pública, Cruz Roja, Bomberos de Costa Rica y Migración, entre otros entes.
Para la presente temporada están confirmados 131 cruceros, de los cuales 103 corresponden a llegadas internacionales y 28 a salidas de naves con turistas costarricenses hacia varios destinos del Caribe.
De acuerdo con estimaciones del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), los visitantes gastan, en promedio, $85 durante su estadía en Limón.
Según cálculos de Japdeva, este año pasarán por la zona 262.000 viajeros, entre extranjeros y nacionales.
Jones concluyó que los destinos de playa Bonita y playa Moín sí podrían verse perjudicados por los hechos violentos de la última semana, debido a que esos dos lugares están muy cerca del centro de Limón.
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“Los turistas que vienen en los cruceros han hecho reservaciones con mucho tiempo de anticipación y creemos que esto que está pasando no va a afectarlos, ni va a afectar el consumo habitual que realizan”, expresó Randy Gordon, secretario de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Limón.
La temporada de cruceros es una de las épocas más esperadas por los limonenses, ya que constituye un fuerte impulso para la economía local.