Los disturbios que se han registrado durante los últimos tres días por la noche en Limón generaron el surgimiento de nuevos grupos criminales.
Así lo manifestó este viernes a La Nación el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Wálter Espinoza Espinoza, quien destacó que algunas de estas organizaciones han surgido de manera espontánea.
“Hemos identificado muchos grupos, algunos que se generan de manera espontánea y otros relacionados con bandas ya conocidas. La efervescencia en la provincia de Limón está relacionada con el movimiento huelguístico y con la pérdida de control que de alguna manera esto genera.
“Sin embargo, no significa que sean los huelguistas quienes están provocando disturbios o afectación a la propiedad de otras personas, sino que el ambiente que se genera es aprovechado por terceros y eso pues nos ha provocado el surgimiento de grupos y de pandillas pequeñas, algunos que pertenecen a barrios. Eso es lo que estamos atendiendo y cada vez nos genera más trabajo”, explicó el jerarca de la Policía Judicial.
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La mayoría de integrantes de los grupos son hombres jóvenes y, según Espinoza, se ha detectado la presencia de menores de edad entre quienes participaron en la quema de llantas, basureros y ramas, incendios con bombas molotov caseras a furgones y una antena de telecomunicaciones, así como saqueos y daños a diversos comercios.
No obstante, las autoridades consideran que la temporalidad de estas agrupaciones no será permanente, ya que podrían desaparecer cuando acabe la huelga indefinida, que ha sido utilizada como mampara por ellos para delinquir.
Michael Soto, ministro de Seguridad, insistió en que tienen claro que son “delincuentes” los que están perjudicando a la población limonense y confía que las investigaciones conjuntas con el OIJ les permitan sentar responsabilidades por los hechos.
“Tenemos algunas personas identificadas y otras han sido detenidas, realmente la participación ha sido de mucha gente y de muchos grupos”, expresó Soto.
Daniel Calderón, director general de la Fuerza Pública, contó el jueves que la mayoría de sujetos actuaron con sus caras tapadas.
“Se trata de gente que se está aprovechando de las circunstancias para ejecutar actos de vandalismo, para ejecutar actos delincuenciales, no son atentados, se han traducido en robos en contra de algunos locales de comercio en la zona”, mencionó Calderón.
Debido a las circunstancias, los comercios y servicios de transportes han modificado horarios, como medida de seguridad para su personal y la población en general. En los últimos días a las 5 p. m. hay muy poca gente en las calles limonenses, ya que los buses y taxis dejan de brindar servicios y la mayor parte de establecimientos cierran sus puertas.
Seguridad reforzada
Los actos vandálicos generados en Limón obligaron a aumentar la presencia de oficiales de Fuerza Pública en la provincia, especialmente en los barrios del centro. De igual forma, el OIJ tomó sus previsiones y envió personal de otras sedes a suelo caribeño.
El director de la Policía Judicial prefirió no precisar el número de agentes que se trasladaron por un tema de seguridad, pero aseguró que son varios con buenas condiciones y capacidad.
“Recibimos datos relacionados con que había interés de parte de estas mismas agrupaciones de afectar la infraestructura del OIJ, de la Fuerza Pública y de los Tribunales de Justicia de Limón, precisamente por esa circunstancia el jueves se tomó la decisión de enviar más personal al sitio, con el ánimo de que colaboren con el tema de la investigación y evidentemente también para que brinden soporte a los compañeros que están en el sitio”, detalló Espinoza.
Soto, por su parte, dijo que el contingente policial ampliado permanecerá en Limón el tiempo que sea necesario, ya que deben mantenerse alertas al comportamiento de las agrupaciones en los próximos días.
Agregó que en Puntarenas también enviaron a más policías, luego de los disturbios que se presentaron este viernes por la madrugada y afectaron a varios comercios y restaurantes de la provincia.
Tras una acción desplegada entre Fuerza Pública y Policía Judicial se logró detener a una persona y también se recuperó parte de la mercadería sustraída a tiendas de la zona, especialmente ropa.
“Creemos que en Puntarenas actúo un grupo con un nivel de organización básico”, puntualizó Soto.
El saldo de los hechos violentos durante esta semana son: un menor de 17 años fallecido por un balazo en la cabeza, un joven de 16 años con un disparo en la pierna, 10 oficiales heridos, dos furgones y una antena de telecomunicaciones del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) quemados, tres cajeros automáticos dañados y 20 personas investigadas.
La Cámara de Comercio de Costa Rica condenó desde el miércoles los actos de vandalismo e hizo un llamado a castigar a los responsables.
Además, la Iglesia católica llamó a la búsqueda de soluciones efectivas y alternativas viables que conduzcan a la paz social y el bien común.