Seis sospechosos de integrar una banda narcotraficante que desde la terminal administrada por APM Terminals exportaba cocaína hacia Europa, deberán descontar seis meses de prisión preventiva.
La Fiscalía Adjunta de Limón hizo esa solicitud al Juzgado Penal y fue acogida luego de una audiencia que comenzó el jueves a las 3 p. m. y terminó la tarde de este viernes.
Todos son costarricenses y vecinos de Limón, entre ellos. Se trata de un operador de grúa apellidado Harris Villalobos, de 42 años, otro de apellidos Zapata Martínez, de 37 años, quien era conductor de un camión a lo interno de la terminal y la supervisora de APM Terminals apellidada Letford Álvarez, de 57 años.
De igual forma se ordenó cárcel mientras avanza la investigación contra un chofer de apellido Jara Gyles, de 34 años; un gruero apellidado Díaz Mora, de 39, y una oficial de seguridad de apellidos Picado Matus, de 29 años.
A esas seis personas, en su mayoría funcionarios de APM, se les investiga como sospechosas de conformar una organización criminal dedicada al tráfico internacional de drogas, según la causa 22-001069-0472-PE.
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En apariencia, el grupo se organizó para trasladar 1.200 kilogramos de cocaína desde dicha terminal en Moín de Limón hasta el puerto de Le Havre, en el noroeste de Francia.
Según las investigaciones desarrolladas por la Policía de Control de Drogas (PCD), la tarde del 23 de julio se habrían confabulado para ingresar los estupefacientes dentro de la cabina de un cabezal, supuestamente conducido por Jara, y, con la ayuda de los miembros de la agrupación que trabajaban en el puerto, habrían evadido los controles de seguridad.
Luego descargaron la droga y la introdujeron en un contenedor que trasladaba una carga de café; sin embargo, una alerta permitió que la PCD detectara y detuviera el cargamento.
En seis allanamientos simultáneos realizados el martes, la Fiscalía y la PCD lograron decomisar evidencia relevante para la causa. Las acciones operativas se llevaron a cabo en seis allanamientos simultáneos en El Porvenir, Valle de la Estrella, Cristóbal Colón, Corales 1, Villa del Mar 2 y Liverpool de Río Blanco, en Limón.
Al día siguiente de esas capturas, el fiscal general, Carlo Díaz, viajó hasta la terminal portuaria que administra la empresa holandesa y junto con el director de la PCD, Stephen Madden, llegó a acuerdos con la administración del puerto a efecto de que en adelante sean más expeditas las acciones que la policía desarrolla contra el narcotráfico en ese muelle.
Cada kilo de coca en nuestro país cueta unos $8.000 (¢5,2 millones), mientras que al llegar a Europa su valor puede alcanzar precios entre los $35.000 (¢22,7 millones) y los $43.000 (¢27,9 millones).
Esta no es la primera vez que personeros de APM son detenidos como sospechosos de ser tentáculos de poderosas bandas dedicados a exportar cocaína.
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