Dos hombres y una mujer, quienes fueron detenidos durante el fin de semana en Heredia con un arsenal que incluía granadas de fragmentación, enfrentarán tres meses de prisión preventiva mientras la investigación penal en su contra avanza.
La oficina de Prensa del Ministerio Público informó de esta resolución después de que concluyó una audiencia de medidas cautelares que comenzó el martes a las 10 a. m. y se extendió hasta avanzada la tarde de ese día. En dicha audiencia, la Fiscalía solicitó la prisión preventiva para los dos individuos foráneos y la costarricense detenida.
Los detenidos son dos hombres apellidados Rivera, nicaragüenses de 35 y 39 años, así como una mujer apellidada Pavón, de 61 años. La Fuerza Pública los detuvo en San Francisco de Heredia la noche del sábado después de intimidar a un conductor en el centro de Heredia con un arma pesada. Viajaban en un Toyota Land Cruiser con dos chalecos balísticos y tres armas de fuego de uso no permitido, además de una pistola de calibre 9 milímetros. Uno de los foráneos tenía una orden de captura por robo agravado.
El domingo, los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) llevaron a cabo un allanamiento en la residencia relacionada con los sospechosos en La Lilliana de San Francisco, Heredia, donde detuvieron a la madre de los detenidos. En el interior de la vivienda se encontró un amplio arsenal que incluía 37 armas de fuego de uso no permitido, 12 pistolas, un lanzagranadas, tres granadas de fragmentación, ¢20 millones en efectivo, 50 kilos de marihuana, 159 frascos de ketamina y varias “cajetas” de cocaína, entre otros elementos.
La posesión, compra, venta, exportación, ocultamiento, fabricación o uso de armas prohibidas conlleva una pena de entre 4 y 8 años de prisión. Además, los acusados se enfrentan a otros cargos que podrían resultar en penas de hasta 15 años de prisión debido a la posesión de drogas, de acuerdo con la ley de psicotrópicos.