Un hombre planeó y ordenó desde Costa Rica el asesinato de un tico radicado en Marbella, ciudad de la provincia de Málaga, España.

Sin embargo, la Policía Nacional de España se enteró de la confabulación en la que estaban involucradas cuatro personas radicadas en ese país y por ello realizó una investigación que le permitió detener a los sospechosos y frustrar el crimen.

La captura ocurrió en diciembre del año pasado, pero fue hasta este miércoles 24 de marzo que las autoridades españolas dieron a conocer el caso, indicando que antes no se reveló ningún detalle para no afectar la investigación.

De acuerdo con los datos policiales, meses atrás un presunto sicario cubano de 27 años fue contactado por una mujer colombiana (25), quien previamente había sido buscada por una pareja, conformada por un español de 29 años y una colombiana de 31.

Estos últimos viven en Marbella, mientras que la otra mujer y el isleño residen en el municipio de Badajoz.

La identidad de los sospechosos no trascendió; empero, se sabe que los dos hombres están en prisión provisional por orden del Juzgado de Instrucción número 1 de Marbella.

Reunión clave

Según un comunicado de la Policía española, el asesinato fue encargado a la pareja de Marbella por un tercero que reside en suelo costarricense.

Esto porque, supuestamente, la potencial víctima tenía una deuda pendiente aquí.

Al parecer, como parte del trato, al cubano le ofrecieron un pago de 15.000 euros, poco más de ¢10,8 millones.

Dentro de las coordinaciones previas, el isleño y el español se reunieron en dos ocasiones, una para entregarle al primero 700 euros (¢500.000) que permitieran cubrir el viaje hasta Marbella y otro para “ultimar los detalles de la ejecución”.

Fue en esa última reunión, en una céntrica cafetería de Marbella, que la Policía procedió con la captura de los hombres, mientras que de manera paralela se desplegaron operativos para capturar a las dos mujeres colombianas.

Datos publicados por la prensa española, muestran que los sospechosos ya contaban con información sobre el domicilio y el teléfono de la víctima.

Las diligencias permitieron decomisar al cubano una pistola de aire comprimido, un vehículo y dinero en efectivo.

La Policía precisó que la idea era atraer al tico con la excusa de abonarle un negocio pendiente de pago y, en ese momento, ejecutar la acción.

Consultado al respecto, sobre la posible coordinación para capturar a quien dio la orden desde Costa Rica, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) dijo no tener datos al respecto.