Hermano de hombre asesinado en el 2017 denuncia que el juicio ha sido pospuesto tres veces

Inicialmente el debate estaba para empezar en el 2020;ahora quedó para el 2025

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

A Luis Gustavo Ugarte Soto, de 44 años, lo asesinaron a golpes mientras se encontraba en el casino de un céntrico hotel de San José, el 30 de abril del 2017. La noticia sobre su fallecimiento no trascendió inicialmente, pues el hombre fue trasladado en estado crítico al Hospital Calderón Guardia, donde murió seis días después debido a las graves lesiones sufridas.

A pesar de que la agresión quedó registrada en un video y en enero del 2018 se detuvo al sospechoso, de apellido Valdivia, este último quedó en libertad sin medidas cautelares, a la espera del juicio en el Tribunal Penal de San José.

Para Óscar Ugarte, hermano de la víctima, resulta inaceptable que, después de seis años de la detención del sospechoso y más de tres años desde la primera fijación de la fecha del juicio este haya sido pospuesto en tres ocasiones. Ahora la familia debe esperar hasta octubre del 2025.

Luis Gustavo era el menor de tres hermanos, no completó la secundaria y se dedicaba a colaborar en una empresa de mensajería propia. También realizaba trámites para varias personas en instituciones como la Municipalidad de San José, el Instituto Nacional de Seguros y la Caja Costarricense de Seguro Social.

Al momento de los hechos, estaba en las máquinas del casino cuando fue agredido por el sospechoso. Desde su ingreso al hospital, permaneció en estado de coma hasta su fallecimiento, el 6 de mayo del 2017. Luis Gustavo era divorciado y padre de una menor.

Óscar desconoce si existía alguna relación entre el agresor y su hermano, y tampoco tiene idea de qué motivó la fatal golpiza. En tres ocasiones los han citado para el debate, lo que implica la necesidad de solicitar permisos laborales para los cinco testigos y genera desgaste para la familia. Por ello, Óscar elevó su queja a la Inspección Judicial de la Corte, donde le enviaron el cronograma de juicios, indicándole que no tienen espacio antes de octubre del 2025.

Don Oscar indicó que tratándose de un homicidio, su planteamiento debería tener prioriodad, pues nadie le asegura que en el 2025 le vuelvan a decir que se pospone y se reprograma por cuarta vez. Él también acudió a la Defensoría de los Habitantes, pero le indicaron que en asuntos judiciales no intervienen y que debía gestionar el caso ante la Inspección Judicial.

Cadena de posposiciones

Después de las audiencias preliminares, la primera notificación indicó que el debate sería el 5 de noviembre del 2020; luego, los citaron para el 9 de mayo del 2022, pero días antes anularon la notificación y los citaron nuevamente para el 23 de enero del 2024; sin embargo, la defensora civil le envió hace poco una copia del documento donde se suspende hasta el 20 de octubre del 2025.

Las razones de las postergaciones han sido diversas, como el compromiso de la defensa del sospechoso en otro juicio con un imputado preso, un juicio programado y, en otra ocasión, un conflicto de agendas según el abogado del hotel.

“Lo que no entiendo es por qué, si en junio del 2022 nos notificaron que el juicio sería en enero del 2024, la defensora pública ahora alega tener un choque de agendas. Mi madre es adulta mayor y el estancamiento del caso le afecta demasiado”, sostuvo Oscar.

Aunque la investigación para la captura duró ocho meses, el proceso posterior ha sido tedioso, a pesar de tratarse de un homicidio. Los acusados son el sospechoso, de 50 años y apellido Valdivia, y el hotel en la parte civil, por la aparente inacción para detener la golpiza.

En una entrevista, en diciembre anterior, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Orlando Aguirre, admitió que el punto más débil del Poder Judicial es la mora judicial, lo que se refleja, por ejemplo, en un expediente que quedó atascado en tribunales por 26 años.

Según declaró, los avances tecnológicos serán un aliado para combatir la mora, y ya está en una etapa avanzada el plan para crear un programa donde se pueda consultar el estado de los expedientes en cada circuito judicial, y así detectar aquellos que se extiendan por muchos años, tarea que actualmente es bastante complicada.