Un conductor de apellidos Brenes Rojas conocerá el veredicto, el próximo lunes, por un homicidio culposo que se le imputa, tras participar en piques en la autopista Florencio del Castillo, en Cartago. Al acusado se le achaca haber golpeado un vehículo ajeno a la ilegal carrera, que se salió de la vía y colisionó contra un árbol, causando la muerte inmediata de Carlos Andrés Villalobos Meza, de 26 años.
En las conclusiones presentadas este viernes, la representante de la Fiscalía, Carolina Martínez Solano, solicitó una condena de cuatro años y medio de cárcel por homicidio culposo y lesiones.
El accidente tuvo lugar en La Lima de Cartago, 100 metros al oeste del puente de Los Gemelos, en la dirección Cartago-San José, el 7 de abril de 2019. En sus conclusiones, Didier Mora Calvo, abogado de la familia del fallecido, solicitó siete años por homicidio culposo, un año por lesiones culposas y dos años por conducción temeraria, alegando la participación del imputado en carreras ilegales, más conocidas como piques.
El imputado, de apellidos Brenes Rojas, está en libertad y es representado por el abogado Rafael Gullock Vargas. Este último pidió que, en caso de aplicarse alguna pena, sea sustituida por arresto domiciliario con tobillera, y solicitó el rechazo de la acción civil por daños y perjuicios.
El jurado permitió que Brenes Rojas se expresara, y este manifestó que siempre ha estado a disposición de las autoridades, esperando que el jurado resuelva basándose en las pruebas disponibles.
El tribunal, compuesto por Grettel Barahona Chaves, Magaly Hernández Solano y Eduardo Briceño Cruz, anunció que el fallo se dará a conocer el lunes a las 8:30 a. m.
Carlos Andrés Villalobos Meza, nieto del futbolista Rafael Fello Meza, cuyo nombre lleva el estadio de Cartago, iba como acompañante en el vehículo conducido por su amigo, Sergio Torres Guerrero, el día del accidente.
Torres, sobreviviente del accidente, permaneció 49 días en coma en el Hospital Max Peralta y estuvo a punto de perder su brazo derecho hasta el codo. Además, perdió el 46% de sus capacidades y vio truncados sus sueños de convertirse en piloto. Lo más doloroso, según sus palabras, fue enterarse de la pérdida de quien consideraba casi un hermano.
“Me toca vivir con cicatrices en el alma y el cuerpo. Él murió debido a la irresponsabilidad de un conductor”, añadió Torres.
Torres Guerrero, quien asistió este viernes ante la sala N.° 1 de los Tribunales de Cartago, relató que era amigo de Carlos Andrés desde la época escolar en el Colegio San Luis Gonzaga.