El exdiputado Abelino Esquivel Quesada fue sentenciado a tres años de prisión por el delito de tráfico de influencias por buscar al ahora exministro de Justicia y Paz, Marco Feoli, para que le otorgara un beneficio carcelario a un pastor que abusó de una menor de edad con retraso mental.
La sentencia 803-2023, del 27 de octubre anterior, fue dictada por Tribunal Penal de Hacienda y la Función Pública en el Segundo Circuito Judicial de San José, según informó la Procuraduría General de la República, que participó como actor civil.
Esquivel, exlegislador del Partido Renovación Costarricense, no tendrá que cumplir la sentencia en prisión porque los jueces le otorgaron el beneficio de ejecución condicional de la pena por un periodo de tres años. Además, lo inhabilitó para desempeñar cualquier empleo, cargo o comisión pública durante un período de tres años.
Esquivel debe pagar al Estado ¢5 millones por el daño social causado y deberá cubrir los intereses sobre este monto desde la fecha en que la sentencia se vuelva firme hasta el momento de su efectivo pago. A esto se sumará ¢1 millón por las costas del proceso.
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Este es el segundo debate que se realiza por este asunto. En un primer juicio, en diciembre del 2021, Esquivel recibió una sentencia absolutoria por parte del Tribunal; no obstante, el Ministerio Público apeló la resolución y consiguió que se ordenara un juicio de reenvío.
Detalles del caso
Los hechos juzgados se remontan a marzo del 2018, cuando Esquivel le habría pedido al entonces ministro de Justicia, Marco Feoli Villalobos, que sacara del Centro de Atención Institucional (CAI) Jorge Debravo, en Cartago, a un pastor de apellido Barquero Benavides.
La solicitud de Esquivel fue para que al pastor condenado se le diera el beneficio de libertad condicional, o que lo trasladaran a un régimen penitenciario semiabierto. Según la denuncia realizada por el propio Feoli, Esquivel identificó al líder religioso como “su amigo”.
“Él me dice que él quería pedir ayuda, un beneficio para su amigo, que él pensaba que el ministro daba los beneficios y, como yo había liberado criminales, podíamos sacar a su amigo, el pastor, que lo conocía hace 30 años”, dijo el exviceministro de Justicia en el 2018.
La acción de Esquivel Quesada buscaba generar así una ventaja indebida para este (el pastor), al no seguir con los procedimientos establecidos por los cuerpos técnicos de los Centros de Atención Institucional y el Instituto Nacional de Criminología, afirma la Procuraduría General de la República (PGR).
Según la información de la PGR, la sentencia todavía puede ser apelada. La Nación intentó comunicarse vía telefónica con Abelino Esquivel, para obtener sus declaraciones; sin embargo, al cierre de esta nota no se obtuvo respuesta.