En dos horas, policía decomisó cuatro celulares, once armas y licor en La Reforma

Autoridades pretenden realizar revisiones aleatorias en las más de 20 prisiones que existen en el país

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En tan solo dos horas, un operativo realizado por varios cuerpos policiales permitió decomisarle cuatro teléfonos celulares, once armas hechizas y algunos litros de bebidas alcohólicas a los reos del complejo penitenciario La Reforma, en Alajuela.

Juan Carlos Arias, director de Adaptación Social, comentó que la intervención ejecutada este miércoles permitió incautar aparatos que los internos utilizan para cometer estafas, así como otros artefactos que emplean para agredirse entre ellos.

“Estamos garantizando la seguridad en los centros penales”, destacó Arias.

La intervención, la primera de este tipo en la presente administración, fue ejecutada por policías penitenciarios en conjunto con oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y de la Fuerza Pública.

El objetivo de las autoridades es realizar, durante las próximas semanas, revisiones aleatorias en las más de 20 prisiones que existen en el país.

En lo que va del año, la Policía Penitenciaria ha decomisado más de 79.780 gramos de diferentes tipos de droga, 695 teléfonos celulares, 798 chips para estos dispositivos,11 drones y 2160 litros de bebidas alcohólicas en las diferentes cárceles del país.

“La policía penitenciaria trabajará de la mano con el OIJ, temas de delincuencia común, delitos como estafas que se ejecutan desde los centros penales y crimen organizado. La iniciativa pretende tener un mayor control, de los hechos delictivos que se ejecutan desde prisión”, indicó Gerald Campos, ministro de Justicia y Paz.

La primera revisión se realiza luego de que un oficial penitenciario de apellido Salazar, fuera trasladado a la Fiscalía este martes como sospechoso de ingresar droga a la Unidad de Atención Integral (UAI) Reinaldo Villalobos del complejo La Reforma.

Salazar resultó implicado por dos hombres que fueron detenidos, en horas de la mañana, cuando pretendían llevar droga a la cárcel. Los sujetos, exprivados de libertad, señalaron al oficial investigado como supuesto colaborador suyo.