Una conductora de apellido Ramírez, quien fue absuelta por la muerte de una pareja de motociclistas, en un accidente de tránsito en Garabito, irá a nuevo juicio.
Así lo ordenó ayer el Tribunal de Apelaciones de Puntarenas, al anular la sentencia de absolutoria, dictada el pasado 26 de abril, por el Tribunal Penal de la zona.
En el nuevo fallo, los jueces de segunda instancia acogieron dos alegatos de los querellantes.
En primer lugar, los abogados argumentaron que los juzgadores solo validaron la versión de la imputada y no consideraron la dinámica real del accidente reconstruida por un perito, ni la versión de una estadounidense, quien fue testigo de lo sucedido.
Además, los juristas dijeron que las reiteradas suspensiones del debate, en este caso, violaron el principio de concentración y continuidad del proceso estipulado en la ley.
El Tribunal de Apelación acogió esos criterios y ordenó un reenvío de lo causa, ante lo cual, se deberá realizar un nuevo proceso de juzgamiento.
Espera de cinco años. Las muertes que se le imputan a Ramírez son las de los novios Paula Isabel Coto Valerín (20 años) y Juan José Morales Chacón (29), quienes, la tarde del 13 de enero del 2008, iban en una motocicleta frente a la gasolinera Costa Verde, en Quebrada Ganado de Garabito.
Aparentemente, en ese momento, Ramírez viajaba en sentido contrario, invadió el carril y colisionó con la moto. Los jóvenes cayeron y fallecieron.
En el 2009, el Ministerio Público solicitó un sobreseimiento definitivo en el caso; sin embargo, los familiares de las víctimas interpusieron una querella, en la que son representados por el abogado Jorge Rodríguez.
El juicio se inició hasta en febrero de este año, pero fue cancelado cuando una jueza se reportó enferma. Posteriormente, se realizó un nuevo debate en el que Ramírez resultó absuelta.
Testimonio clave. La única testigo, quien aseguró observar el accidente, fue la estadounidense Carole Leckrone Mintzer.
En febrero, Mintzer vino al país a declarar en el debate y aseguró que había rogado durante cinco años para que se escuchara su testimonio.
“Es frustrante”, expresó en esa ocasión.
De acuerdo con el relato de la foránea, el día del accidente, ella y su esposo viajaban en un vehículo por ese sector.
“Ellos (los motociclistas) venían en una posición normal. El vehículo que venía hacia nosotros se salió de control y pasó por el frente de nosotros. Cuando nos cruzó, vi a la motocicleta que se fue hacia los arbustos, simplemente desapareció”, contó ante los jueces.
Mintzer aseguró que, tras la colisión, intentó relatar lo que vio a un policía que estaba en el lugar, pero este le dijo que podía irse, por lo que ella le dejó sus datos en un papel.
Seis meses después, la estadounidense fue contactada por la familia de los fallecidos y en el 2009 vino a Costa Rica con el objetivo de declarar. Sin embargo, un juez de Jacó le dijo que sí podía regresar al debate y no le recibió el testimonio, como anticipo de la prueba.
La extranjera regresó este año y finalmente testificó.