Poasito se recupera del desastre, pero paso por catarata La Paz sigue cerrado

Trabajos se concentran en valoración de terrenos y atención emocional a vecinos

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Los trabajos de recuperación en las comunidades alajuelenses de Poasito y Carrizal, tras los deslaves del lunes pasado, avanzan a un buen ritmo y los vecinos intentan regresar a la normalidad.

Principalmente las labores se concentran en la recuperación de la calle San Vicente, en habilitar el paso por la catarata de La Paz –cerrado totalmente ayer por el Conavi– y en recabar los datos de las familias afectadas para enviarlos a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).

Así resumió Dinorah Barquero, vicealcaldesa de Alajuela, el panorama con el que amanecieron hoy miércoles esas comunidades y el protocolo que se sigue para la atención de la emergencia.

"La parte de Poasito está restablecida. Estamos trabajando con las comunidades para ver con la población afectada la parte específica de ayuda. Todo está dentro de la normalidad que puede traer la cola de alguna emergencia", contó la funcionaria municipal.

Explicó que las maquinarias ya concluyen los trabajos de limpieza en las vías afectadas y que el tránsito por ese sector ya está habilitado, a excepción de la ruta de la catarata La Paz, donde se colocará un puente tipo bailey en los próximos días.

También hay una inspección a cargo de personeros de la CNE y de la Municipalidad de Alajuela quienes realizan una valoración completa del terreno. Esos trabajos se hacen en coordinación con geólogos del mismo municipio.

Barquero recordó que pese a la magnitud de la tragedia, las cerca de 27 familias afectadas se ubicaron temporalmente en casas de familiares o amigos, por lo que no fue necesario abrir albergues.

También la vicealcaldesa indicó que se mantiene un número importante de trabajadores que están brindando servicios técnicos en áreas sociales.

"Recordemos que fue una zona muy golpeada por el terremoto. Este desastre vuelve a golpear las secuelas emocionales", agregó Dinorah Barquero.

En relación con la comunidad de Fraijanes, manifestó que en el sector no hubo familias afectadas. Ahí solo se registró el colapso de calle Montenegro que ya había resultado impactada por el terremoto de Cinchona.

Barrantes prefirió no hablar del costo de los daños y dijo que la actividad comercial ya fue retomada en aquellos establecimientos con afectaciones leves o nulas.