Un sujeto identificado por la Policía Judicial como Andrés Ávila Gómez, de 30 años, falleció al recibir tres balazos la noche del jueves.
Luego de escuchar varios impactos de bala, a eso de las 10 p. m., vecinos de Guararí de Heredia alertaron a los cuerpos de socorro y policiales, pero al llegar al sitio, en un lote baldío cerca del súper Prices, los cruzrojistas declararon fallecido al paciente.
El hombre tenía impactos en el tórax, el hombro izquierdo y el abdomen. De momento se desconoce quién o quiénes perpetraron el homicidio que inicialmente se investiga como una venganza o un ajuste de cuentas.
Ávila estuvo preso desde febrero del 2016 por robo agravado y había salido años atrás. Incluso había ganado un recurso de amparo interpuesto ante la Sala IV porque no le permitían la visita conyugal con la madre de sus dos hijas, ambas menores de edad. Lo anterior consta en el expediente N.° y la 16-012092-0007-CO y la resolución. N.º 2016-013710.
Avila estuvo privado de su libertad en el Centro de Atención Institucional San José (San Sebastián) a la orden del Tribunal Penal de Juicio de Heredia y luego pasó a otros centros penales.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que en nuestro país la cantidad de homicidios ya casi supera en un centenar a la cifra del mismo periodo del año pasado (el más violento de la historia), pues el dato actual es de 324 en todo el país, mientras que en el 2022 eran 228.
En Heredia han ocurrido 19 homicidios, solo dos más que a igual fecha del año pasado, por lo que son otras provincias como San José y Limón, las que marcan el detonante en homicidios que obligó al gobierno a replantear su política de Seguridad y cambiar toda la plana mayor del Ministerio de Seguridad Pública el pasado 9 de mayo.
San Francisco de Heredia, donde queda Guararí, lleva cinco asesinatos, uno de los más recientes ocurrió el 6 de febrero cuando de un balazo en la cabeza mataron a Jorge Ulises Galeano Canda, de 31 años, cuando se movilizaba en bicicleta.