Avión ultraligero se precipitó en Guápiles

Los dos ocupantes salieron ilesos

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Un avión ultraligero matrícula ULTI-050 se precipitó a las 9:09 a. m. de este sábado cerca del Colegio Experimental Bilingüe de Pococí. La aeronave cayó en un potrero cuando al parecer el piloto realizó un aterrizaje forzoso.

Según el Cuerpo de Bomberos y la Cruz Roja, los dos ocupantes resultaron ilesos y no fue necesario su traslado a ningún centro médico.

Se trata del piloto Yaveth Noé Santana Jiménez, de 35 años y del copiloto Joan Manuel Avendaño Miranda, de 25. El primero es vecino de Cañas, Guanacaste y Avendaño es de San Sebastián, San José.

El ultraligero quedó a unos 200 metros de la entrada de la pista de aterrizaje de Guápiles, pero no se precisó si iba saliendo o llegando a Pococí.

El aparato quedó destruido y ahora se investigan las causas de accidente. Se trata de un ultraligero Quad City Challenge Special, con dos asientos. Es fabricado por la empresa Quad City en Illinois, Estados Unidos. Este modelo, construido con una aleación de aluminio, tiene un tren de aterrizaje en triciclo, 7,9 metros de envergadura y motores de 40 caballos de fuerza. Tiene capacidad para planear con los motores apagados.

El ultraligero pesa unos 200 kilos y alcanza una velocidad máxima de 150 kilómetros por hora.

Información disponible en la página de la Dirección General de Aviación Civil no precisa quién es el propietario de la unidad.

Las estaciones de Bomberos de Guapiles y Cariari, atendieron la emergencia. Leonardo Castro, uno de los bomberos que acudió al sitio, dijo que el avión está destrozado, pero como cayó en un potrero solo se registraron los daños en la aeronave y eso mitigó posibles lesiones en los pasajeros.

Hace un mes un accidente similar en ese mismo cantón causó daños materiales en una casa y un carro y estuvo a punto de causar una tragedia.

Esa vez cayó un helicóptero ultraligero en la urbanización Sinaí de Guápiles, Pococí, Limón. La nave destruyó el techo de un vehículo Suzuki Grand Vitara que estaba estacionado en la cochera de la casa donde cayó el avión. Esa vez el piloto también resultó solo con golpes leves.