Suiza: el equipo que viene de muchos lugares

El once base del seleccionado helvético está formado casi en su totalidad por emigrantes de otros países de Europa

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

En el fútbol, “la pelota no se mancha” (sentencia de Diego Armando Maradona), porque este deporte es tan maravilloso que con un balón la gente se entiende y no importa su procedencia: lo que vale es jugar.

Lo anterior viene a cuento porque semanas atrás varias publicaciones hicieron un ejercicio de ironía futbolera, a raíz de la nueva ley de entrada de ciudadanos de países de la Unión Europea (UE) a su mercado laboral.

El blog alemán Extra 3 fue el primero en poner sobre el tapete el enorme sin sentido de la legislación aprobada en febrero en un referendum, ..., y lo hizo con fútbol.

Si a la Selección de Suiza le quitan a los emigrantes y sus descendientes se quedaría apenas ¡con tres jugadores! Ni para empezar un partido...

Los tres “habilitados” del equipo titular serían Steve von Bergen, Reto Ziegler y Michael Lang.

Apeados de ese once –sigue el ejercicio– quedarían el mismísimo capitán Gokhan Inler, cuyo padres son turcos, y Blerim Dzemaili, pues viene de Macedonia.

Tranquillo Barnetta, de papás italianos y Granito Xhaka, cuyos padres son de Kosovo, serían parte de la zaranda.

El excelente meta Diego Benanglio es de padres italianos y son bosnios los de Haris Seferovic.

Su estrella, Xherdan Shaqiri, nació en la desaparecida Yugoeslavia y Pajtim Kasami vio la primera luz en Macedonia.

Además, Gelson Fernández nació en Cabo Verde y vive desde los cinco años en Suiza (tiene 27).

Fuerte. El pasado futbolero coloca a Suiza lejos de ser una potencia; su presente, por el contrario, la puso como cabeza de serie en Brasil.

El cuadro dirigido por el sapiente Ottmar Hitzfeld echó mano de su talento joven para forjar su tercera clasificación al hilo.

Hitzfeld asumió el cargo en el 2008, luego de que en el Mundial del 2006 los helvéticos fueran despachados, en segunda ronda, por penales y sin permitir goles en todo el certamen. Esas cosas del fútbol.

Hace cuatro años se dieron el lujo de arrugarle el carné de favorita a España, a la que derrotaron en el primer juego de su grupo.

Pasaron sin apuros la ronda eliminatoria, se clasificaron entre los primeros ocho puestos del ranquin de la FIFA y esta los premió con la distinción de ser cabeza de serie de uno de los grupos de Brasil 2014.

Con un crisol de nacionalidades y un proceso muy serio en competiciones menores, Suiza debe ser considerada con seriedad: sus jugadores no manchan la pelota.