Al encajar ayer los tres tantos ante Holanda y recibir un total de 14 anotaciones en el torneo, Brasil se convirtió en el anfitrión más goleado de un Mundial mayor.
La anterior marca negativa la tenía Suiza, quien en la cita de 1954 había recibido 11 tantos.
Esos 14 goles en contra son el peor registro de una defensa verdeamarela en sus 19 citas.
“La defensa de 2014 entró en la historia como la más vencida de la selección brasileña en 20 mundiales disputados por el país y superó a la de 1938, cuando Brasil encajó 11 goles”, publicó ayer la página del diario O Globo , en Río de Janeiro.
El lamento por tal estadística también lo dejó entrever el rotativo Lance , que subrayó el hecho de que la goleada por 7-1 ante Alemania, el martes pasado, no se subsanó.
“Un fin melancólico. La selección brasileña terminó su participación en el segundo Mundial en suelo nacional con nueva goleada. El 3-0 impidió a los comandados por Scolari minimizar las heridas de la histórica goleada del pasado martes” , según escribió Lance .
Pero los números rojos no se quedan ahí para los locales, debido a que desde hace 80 años no sumaba dos juegos perdidos al hilo en un Mundial, además de que no recibían 10 goles en dos encuentros consecutivos. La última vez había sido en Italia 1934 contra España, por 3-1, y Yugoslavia, 8-4.
De acuerdo con Mister Chip, estadígrafo español, Brasil cierra su Mundial dejando a Julio César como el portero de dicho país con más goles recibidos, 18 (14 en la reciente edición y cuatro en el 2010).
Para hacer más pesada la loza que ayer le cayó a un país que dejó por un tiempo sus protestas para soñar con el título, se debe indicar que Brasil quedó a solo dos tantos de ser el equipo más goleado en un Mundial, pues solo es superado por Corea del Sur, con 16 en Suiza 1954.
“Brasil se despide del Mundial de forma melancólica”, “Fiasco”, “Brasil sufre nueva goleada y termina cuarto”, “Nueva decepción” y “Brasil termina con otro fiasco” fueron solo algunos de los titulares en la prensa local de ayer, que no digiere los duros números rojos.