La Tricolor Sub-20 posee un amplio repertorio en la zona de generación ofensiva, con futbolistas que ya tienen recorrido en la división de honor y una base de promesas que disputaron el último Mundial Infantil.
El equipo de Marcelo Popeye Herrera cuenta con hombres que demostraron su capacidad para guiar al equipo hasta los cuartos de final de la Copa del Mundo Sub-17 de Chile, como el caso del delantero Andy Reyes, quien luego destacó por sus goles en Carmelita, y el volante Roberto Córdoba, recientemente contratado por Alajuelense.
Además, se le suman una serie de futbolistas que no pudieron estar en este Mundial pues son unos meses mayores que lo permitido por FIFA para esa categoría, aunque sí les alcanza para hacerle frente al proceso venidero.
Son los casos de los extremos Jimmy Marín (Herediano), Gerson Torres (contratado por el América) y Rándall Leal (Mechelen de Bélgica), todos futbolistas con un rodaje en la máxima categoría, y el volante Marvin Loría, ficha de la S y quien estuvo a préstamo con el equipo juvenil del Benfica durante el año pasado.
En el caso de Torres, fue uno de los hombres más destacados del Team en la pasada campaña, en la que se ganó la titularidad, posteriormente el llamado para disputar la Copa Uncaf con la Selección Mayor y la posibilidad de firmar con las Águilas del América para enrolarse en el equipo juvenil.
Marín destacó en su paso por Belén durante el torneo anterior y comenzó esta temporada como titular en el Team. En su primer juego mostró un buen rendimiento y anotó un gol.
"Yo creo que el entrenador (Marcelo Herrera) tiene que aprovechar a Gerson y Jimmy al máximo, son de los mejores volantes del país. Son técnicos, rápidos y jugadores ideales para una Selección Sub-20 pues ya tienen rodaje", explicó el estratega de Herediano, Hernán Medford, quien ha dirigido a ambos.
Leal cumplirá su segunda temporada en el balompié de Bélgica, en donde aparece con frecuencia como relevo. En una gira realizada por la Sele en Europa, el timonel patrio se convenció de incluirlo entre sus opciones.
También hay que contar al atacante guapileño Kevin Masís y al delantero manudo Barlon Sequeira, ambos mundialistas y hombres habituales en los llamados de Popeye.
El delantero santista ingresa como variante en la mayoría de partidos de su equipo desde el torneo pasado, mientras que Sequeira ya debutó con los manudos.
Variedad. Cuando se combinan dos camadas talentosas, se puede proyectar una buena Sele Sub-20.
Por ejemplo, en el proceso rumbo a la cita Sub-20 de Egipto, en el que se logró un histórico cuarto lugar, se juntó a futbolistas como Marco Ureña, David Guzmán y Daniel Varela, que disputaron el Mundial Sub-17, con los que son un año mayores como Esteban Alvarado, Diego Madrigal y Diego Estrada, para formar una base sólida.
Desde la etapa de clasificación, el equipo nacional mostró un repertorio sólido y luego lo confirmó en el Mundial.
"Cuando se unen estas dos generaciones con un año de diferencia es que se puede dar un salto de calidad", explicó el estratega de esa camada, Rónald González.