En un espectacular Super Bowl, los Patriots se repusieron de una desventaja de 28-3 y derrotaron a los Falcons en tiempos extra, 34 a 28.
Guíados por la mejor versión de Tom Brady, el equipo de Nueva Inglaterra logró empatar el partido a un minuto del final del último cuarto, con lo que obligaron a jugar, por primera vez, un tiempo extra en un Super Bowl.
En la primera posesión del tiempo añadido Brady envió el balón a James White, quien recibió en zona de anotación e hizo el touchdown que le dio el triunfo a los Patriots.
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En los tres primeros periodos los Atlanta Falcons desaparecieron a los favoritos Patriots gracias a un gran trabajo defensivo y una gran labor del mariscal Matt Ryan.
Tras un primer periodo muy cerrado, en el que se impuso la labor defensiva de ambos equipos, en el segundo cuarto Atlanta consiguió 21 puntos luego de anotar tres touchdown y sus respectivos puntos extra.
Devonta Freeman fue el primero en anotar en el territorio de Nueva Inglaterra tras correr cinco yardas.
Menos de cuatro minutos después Ryan lanzó un balón desde la yarda 28 que recibió Austin Hooper en terreno bueno.
Dos minutos antes de irse al descanso Robert Alford interceptó un lanzamiento de Tom Brady y anotó el tercer touchdown tras correr 82 yardas.
Tras fallar en todas los intentos, los Patriots descontaron al final del segundo cuarto con un gol de campo de Stephen Gostkowski.
Los Falcons aumentaron la ventaja a 28-3 con una anotación de Tevin Coleman a la mitad del tercer periodo, otra vez tras un servicio de Ryan.
Pero New England tuvo un regreso espectacular y entre la última parte del tercer cuarto y el final del juego lograron el empate, lo que significa la tercera mayor remontada en la historia del Super Bowl.
Al final del cuarto por fin apareció Tom Brady, quien dio el pase para que James White anotara seis puntos para New England.
Otro gol de campo de Gostkowski al inicio del último periodo puso el marcador 28-12 y fue el preámbulo de un final emocionante.
Los Patriots lograron empatar tras dos touchdown de White, seguidos cada uno por conversiones de dos puntos de Danny Amendola.
En tiempo extra Brady y White se volvieron a juntar para liquidar el partido, con lo que consiguieron el quinto título de Super Bowl de los Pats en su historia, todos bajo la guía del mariscal de campo.
Los Falcons se quedaron con las ganas de ganar el campeonato de la NFL por primera vez en su historia y suman la segunda derrota en una final.