Deporte tico recibe golpe al hígado: Se suspenderían cerca de 600 eventos en el 2020

La crisis por el covid-19 trae duras repercusiones económicas, pues Icoder calcula que, entre todas las federaciones, se podrían cancelar cerca de 600 eventos; entes deportivos recibirán 50% menos de dinero

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La crisis golpea con fuerza al deporte tico, víctima de dos realidades evidentes: 1. Está muy lejos de ser la prioridad, cuando el gobierno se enfoca en salvar vidas y empleos. 2. El Ministerio de Salud recomienda que no se practique ninguna disciplina en grupo, y también prohibió que se realicen eventos masivos.

El Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (Icoder) ya conoce las primeras consecuencias tangibles, pues se calcula que en el 2020 se podrían cancelar cerca de 600 eventos deportivos entre las 130 federaciones y asociaciones.

Estos órganos, a su vez, perderán el 50% del presupuesto que les correspondía para este año. Cada Federación presentó un plan de trabajo al Icoder en el que solicitó el dinero para sostener su área administrativa, las membresías para los eventos internacionales de sus atletas, un programa de capacitaciones y otro de competencias nacionales.

Como no se puede salir del país y tampoco planificar eventos locales hasta nuevo aviso, el Icoder optó por reducir a la mitad el monto de casi ¢1.600 millones que se repartiría este año entre todas las federaciones y asociaciones; es decir, se distribuirán cerca de ¢800 millones con el objetivo de cada ente mantenga las funciones administrativas.

Hay menos dinero y, por ende, menos eventos, y la posibilidad de que alguno se reprograme es baja, pues con la disminución del dinero y la urgencia de quedarse en casa hasta nuevo aviso, es difícil que se pueda organizar una competencia.

El último reflejo de esta realidad es la suspensión de los Juegos Nacionales, que ya se habían cambiado de fecha para diciembre próximo, y ahora se harán hasta a mediados del 2021.

La directora del Área del Deporte del Icoder, Gabriela Schaer, explicó que los 600 eventos que se cancelarían a lo largo del año contemplan festivales, torneos cortos y campeonatos en distintas categorías; infantil, juvenil, mayor y máster.

“Si los deportistas no se quieren estancar, se deberían hacer programas a través de plataformas digitales para que ellos puedan adaptar el entrenamiento al espacio que tienen en las casas", explicó Schaer.

"Estamos tratando de ayudarles a las entidades deportivas para que mantengan su estructura administrativa y que, cuando se autorice, se haga más fácil poder arrancar, porque realmente es más difícil empezar de cero”, agregó.

Por ejemplo, para marzo, abril y mayo se tenía previsto celebrar el Día Internacional de Deporte y las eliminatorias para los juegos nacionales en atletismo, tenis de mesa, ajedrez y triatlón.

De marzo a diciembre también se planificaron campeonatos locales en todo el país y programas de masificación y regionalización, que lo que buscan es llevar el deporte a zonas en las que apenas se conoce y se practica poco.

Incertidumbre. El Ministro de Deportes, Hernán Solano, reconoce que estos recortes también se producen por la inestabilidad económica que vive la organización en este momento, pues a diferencia de otras instituciones públicas en las que los fondos provienen directamente del presupuesto nacional, en Icoder los recursos vienen de otros entes públicos.

Por ejemplo, son partidas que derivan de los presupuestos de la Junta de Protección Social, el Instituto de Fomento y Asesoría Municipal (IFAM) y el Fondo de Desarrollo y Asignaciones Familiares (Fodesaf), entre otros.

Solano cree que, en este momento, es difícil determinar si estas instituciones podrán girar el dinero que se aprobó, cuando se desconoce el impacto económico que sufrirán a causa de la crisis provocada por el covid-19.

“Es un momento de incertidumbre. Por ahora lo que queremos es garantizar el área administrativa de las federaciones para que no se caigan, y por eso mantendremos un 50% del presupuesto aprobado”, sostuvo Solano.

El dirigente solicitó un informe para definir qué decisiones tomar con el resto del presupuesto que se aprobó para este año, dado que el Icoder recibiría cerca de ¢14.000 millones, un dinero que se invertiría en distintos programas, aunque la mayoría de estos se congelaron, pues son en grupo, al aire libre o masivos.

Por ejemplo, se presupuestó un alto monto económico para que distintos atletas se prepararan fuera del país, pero ahora no pueden salir a causa del nuevo coronavirus que golpea a gran parte del mundo.

Solo la suspensión de Juegos Deportivos Nacionales le ahorraría cerca de ¢1.000 millones al Icoder.

Por ahora, no se contempla frenar ningún proyecto de infraestructura deportiva, pues Solano cree que, en el mediano plazo, pueden colaborar en la generación de fuentes de empleo, una de las prioridades del gobierno.