Sorpresivo pero cierto: algunos equipos dudan si les conviene el regreso de su afición al estadio

Cuatro clubes de la Primera División están indecisos, mientras que uno prefiere seguir jugando sin público. Así mismo, siete afirman que están listos para abrir de inmediato a sus seguidores cumpliendo el protocolo. “La Nación” recopiló los argumentos de los 12 equipos

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Después de casi un año con los estadios en silencio, las graderías vacías y ausentes de color, al fin hay una luz al final del túnel. La esperanza de volver a gritar un gol, emocionarse con una jugada de lujo y cubrirse con la bandera del club de sus amores en en los graderíos parece estar muy cerca de ser posible. Sin embargo, no todo es un cuento de hadas y las propias instituciones no están 100% convencidas.

Aunque a algunos les cueste creerlo, cuatro integrantes de la Primera División están indecisos y analizarán con detenimiento si aceptan de nuevo a sus fanáticos, si es que el Ministerio de Salud aprueba el protocolo que presentó la Unafut. Mientras, uno de los equipos de inmediato externó que está en contra y prefiere seguir a puerta cerrada.En contraparte, siete están convencidos de la apertura.

Alajuelense, San Carlos, Pérez Zeledón, Herediano, Guadalupe, Grecia y Saprissa están dispuestos a tener a sus hinchadas de inmediato. Por su parte, Cartaginés, Sporting FC, Limón FC y Jicaral prefieren esperar para conocer en detalle lo que les exigirán, ya que por ahora no lo saben. Santos es quien no considera una buena idea esta posibilidad. VEA: opinión de dirigentes de cada club abajo.

¿Cuáles son los argumentos de quienes no están convencidos o lo ven del todo inconveniente en este instante?

El tema económico es el factor principal, ya que por ahora no está definido si se permitirá un ingreso del 25% o el 50% del aforo de los reductos. Además, los directivos que tienen esta postura afirman que deben invertir en más personal de seguridad, productos de higiene, implementos para medir la temperatura y mejoras en zonas claves, como los servicios sanitarios.

Por ejemplo, el servicio de un oficial privado cuesta entre los ¢17.000 y los ¢20.000 por partido, según los entrevistados. Incluso, Rafael Arias, jerarca santista, reveló que abrir el Ebal Rodríguez le cuesta entre ¢1.200.000 y ¢1.500.000 en la normalidad por gastos fijos, lo que no podría recuperar si reciben permiso con capacidad reducida.

El Ebal tiene espacio para 2.000 personas, por lo que el 25% son apenas 500. De igual manera, solo ante la Liga y la S tienen taquillas realmente buenas, añadió Arias.

Un elemento adicional que también pone a dudar a estos directivos es el pago de los cuartetos arbitrales. La Fedefútbol asumió este rubro durante la pandemia de la covid-19, por la reducción de ingresos que generó a los equipos, pero no se sabe si al volver la fanaticada esto volverá a cobrársele a los equipos.

Vale la pena intentarlo

Incluso los equipos que están a favor de que se de una reapertura de estadios reconocen que no se verán del todo beneficiados en lo económico o calculan apenas podrán cubrir lo que inviertan.

No obstante, consideran que vale la pena intentarlo y demostrar que pueden cumplir con los lineamientos del protocolo. A su modo de ver, esta es la única forma de ir gradualmente hacia la normalidad y, si la pandemia lo permite, contar con aforo completo en un mediano plazo.

Clubes como Alajuelense y San Carlos ya tienen diseñados los planes que seguirán en el momento que les den el banderazo. Ambos darán prioridad a sus socios, ya que los tienen identificados y es menos complejo darles un seguimiento.

Eso sí, en el caso de los norteños, dieron a conocer que antes de la pandemia contaban con 2.000 seguidores que pagaban mes a mes por su espacio, mientras que en la actualidad son cerca de 750. De igual manera quieren premiar a estos seguidores fieles que se mantuvieron y apuntan a repuntar si ya se puede asistir a los reductos.

Detalle por equipo:

- Saprissa: sí abrirían.

“Nuestra postura es abrir el estadio con el porcentaje, los protocolos que se aprueben y siguiendo las normas que dicte el Ministerio de Salud. Antes de la pandemia teníamos 10 mil sillas precolocadas entre socios y patrocinadores, lo que representa casi el 50% del estadio. Le daríamos prioridad a los socios que se han mantenido leales con su silla y serían los primeros que permitiríamos que ingresen al estadio. Hay que determinar lo que implica la parte de logística y definir qué hacer si el porcentaje que aprueban es menor a la cantidad de socios que tenemos. En principio, aunque implique más gasto en el corto plazo, sentimos que es importante para el fútbol y los equipos que se permita que la afición regrese”.

Juan Carlos Rojas, presidente del club.

- Guadalupe FC: sí abrirían.

“Queremos abrir con los protocolos que se aprueben. Sería sobretodo pensando en la gente que nos apoya y en brindar una distracción, que es muy necesaria en estos tiempos. Para un equipo como nosotros no es rentable en lo económico, pero es importante el seguir creando afición a nuestro club”.

Antonio Abasolo, presidente del club.

- Santos: prefieren no abrir.

“No vamos con que se de la apertura. Prefiero jugar a puerta cerrada, porque abrir las puertas del estadio significa que pierdo por partido entre ¢1.200.000 y ¢1.500.000. Para nosotros no es rentable y menos un 25%. Normalmente a nosotros nos salvan dos taquillas por temporada, que son la de Alajuelense y Saprissa, esto con un estadio a capacidad total de 2.000 personas y lo que se recaudan son ¢15.000.000 por partido. Sin embargo, imagínense que si se abre a un 25% del aforo para un partido contra un rival de estos, que es triple A y los costos se elevan el doble en seguridad y Fuerza Pública, la perdida sería grande.

Rafael Arias, presidente del club.

- Herediano: sí abriría.

“Estamos haciendo las gestiones para que se pueda abrir y poder llevar a la gente al estadio. Nosotros estamos utilizando el Nacional y el 25% de ese estadio es lo que cabía en el Rosabal Cordero. Igual, hay que analizar el tema de costos, pero sí queremos que el público asista, porque hace falta.

Orlando Moreira, directivo del club.

- Jicaral: analiza la opción.

“Tenemos que analizar el costo-beneficio, para determinar si es rentable abrir o no. Dependerá de cuánto nos cueste, pero ahorita está bajo estudio de la junta directiva. Hay que ver qué nos van a solicitar, porque si van a pedir doctores en cada una de las puertas de ingreso, pues será muy complicado. Dependerá de lo que soliciten y lo que cueste, para definir si se abre. Igualmente, la situación económica de los equipos no está muy bien y si se incrementan los costos, pues sería más costoso que la gente ingrese”.

Roy Barrantes, presidente del club.

- Grecia: sí abriría.

“A nivel económico no es ningún negocio, pero pensamos que debemos de ir paulatinamente y si no lo hacemos, la afición no llegará a apoyar cuando se pueda al 100%. Ya sea al 25% o al 50%, nosotros abriríamos, pero dándole prioridad a los socios. El organizar un evento masivo como este genera muchos gastos y ahora con el protocolo de salud sería más estricto. Hay que pensar en aumentos en seguridad, lo que conlleva la parte médica, insumos para medir temperatura, limpieza y hasta señalización, porque el estadio debe estar mejor rotulado. Así mismo, mejoras a los servicios sanitarios. Por poner un ejemplo, un oficial nos cuesta por partido entre los ¢17.000 y los ¢20.000.

Peggy Guillén, gerente del club.

- Alajuelense: sí abriría.

“Hemos seguido muy de cerca este tema y la misma Liga tiene listo su protocolo, mismo que se ha conversado con las autoridades de salud. Hemos sido claros que la prioridad en este momento la van a tener los socios, que es un grupo de aficionados que se ha mantenido apoyando a lo largo de la pandemia. Hay un elemento fundamental, y es que los socios están empadronados, tienen su carnet y sabemos quiénes son, entonces es fácil contactarlo. La primera fase sería con ellos y hemos iniciado el trabajo para segmentar los espacios en el estadio, esperando el momento en el que se de el visto bueno. Esperamos que ojalá se autorice el 50% de la capacidad del estadio, creemos que lo podemos manejar de la mejor manera.” (Declaraciones a Monumental).

Fernando Ocampo, presidente del club.

- Cartaginés: analiza la opción.

“Queremos que los aficionados vuelvan en la cantidad que sea, pero hay que valorar qué nos piden en el protocolo sanitario y dependiendo de esto, tomar una decisión. Si sale muy costoso y la logística es muy complicada, pues no es tan factible. Meter más de 2.000 personas en un estadio aún con otro accesos nos tomaría muchísimo tiempo. Hay demasiados aspectos a valorar, como la forma en la que será el ingreso, cómo se controla lo del medio tiempo y la forma en la que deben utilizarán los sanitarios. Conocemos algunos aspectos del protocolo, pero en detalle no. A hoy no tengo una decisión tomada”.

Leonardo Vargas, presidente del club.

- Sporting FC: analiza la opción.

“Si se logra la autorización entraríamos a analizar el tema. En este momento no tenemos una respuesta, no sabemos qué haríamos. Hay que valorar el costo-beneficio y determinar qué es lo más conveniente para el club”.

Rándall Row, gerente del club.

- Pérez Zeledón: sí abriría.

“Estoy de acuerdo en que se abra, porque la gente está esperando esto y quiere ver partidos. Pienso que hasta podría ser a un 50%, no solo a un 25%, porque se tienen las condiciones y hay espacio para cumplir con el distanciamiento. Que nos permitan la cantidad que consideren mejor, pero que se de. Se incrementará el gasto, pero todas las partes involucradas en el fútbol debemos manejarlo para que no sea más caro el organizar el juego que lo que se ingrese por las taquillas. Vamos a tener que incrementar seguridad, administrativos y hay que gastar en todos los implementos de higiene”.

Juan Luis Artavia, presidente del club

- Limón FC: analiza la opción.

“Tenemos que analizarlo a lo interno. Nosotros no jugamos en nuestro estadio y al no tener a nuestra afición cerca, pues debemos evaluar los costos operativos, para determinar si es mejor continuar así o abrir. También necesitamos saber qué se va a aprobar y cuál porcentaje permite, porque podría ser más costoso hacer una apertura a un porcentaje bajo, que jugar sin público. Uno de los rubros que se incrementaría bastante es la seguridad. Nuestra principal limitante por el momento es que no podemos usar nuestro estadio”.

Reynaldo Parks, gerente del club.

- San Carlos: sí abriría.

“Estamos de acuerdo en que se abran los estadios, creemos que lo menos que podemos hacer por nuestros socios es que puedan regresar, porque en este año pandemico han respaldado con su cuota mensual. Estamos preparados para esto, el estadio está bien distribuido. Hemos hecho nos números y con 1.300 o 1.500 personas cubrimos los gastos de seguridad e insumos para el protocolo. La cantidad de socios bajó y de 2.000 caímos a unos 750, pero es normal y si se da la apertura muchos volverán.

Sergio Chaves, presidente San Carlos