Mercedes de Montes de Oca. La alegría por marcar tres goles y darle el triunfo a la UCR, 3 a 2 ante Belén, fue momentánea para el atacante Juan Vicente Solís.
Apenas finalizó el compromiso de ayer la nueva preocupación de Solís se centra en cómo subsistir sin ingresos hasta que arranque la pretemporada, ya que terminó contrato y aunque se quede en la U o encuentre nuevo equipo pasará el periodo de vacaciones sin ingresos.
Juan Vicente no tiene ofertas de momento y espera que sus goles le den trabajo, pero hoy en día vive la realidad de muchos de los futbolistas que quedarán libres al terminar el Verano: necesita estirar sus ahorros para no pasarla mal.
“Es algo normal, uno finaliza contrato y aunque renueve o llegue a otro equipo debe esperar a que inicie la pretemporada para que le vuelvan a pagar. Ese tiempo que pasa se hace difícil en lo económico”, indicó Solís.
Los dirigentes aseguran que las vacaciones son pagadas para quienes tienen contrato vigente, como dicta la ley, pero es distinto para quienes deben negociar o recién son fichados.
“A los futbolistas que tienen vínculo con el club se les sigue pagando en vacaciones, pero los que terminan y se renuevan o a los que llegan, se les paga hasta que empieza la pretemporada, eso ayuda a bajar la carga”, dijo Freddy Campos, del Uruguay.
Los equipos eliminados reconocen que estos casi tres meses sin campeonato complican en lo financiero, por lo que deben recurrir a este tipo de estrategias legales y ser estrictos con los gastos durante el certamen.
“Estos casi tres meses sin campeonato son difíciles. Hay que buscar opciones de patrocinios que permitan sostener lo financiero”, indicó el jerarca de la U, Luis Gamboa.
Por su parte, los jugadores reconocen que no es sencillo y la única manera de no pasarla mal es ahorrar en la temporada.
“Cuando uno termina sabe que va a pasar sin ingresos hasta que consiga equipo e inicien los entrenamientos y es duro porque hay cuentas por pagar”, manifestó el portero Erick Sánchez.