Aún cuando creen que es un portillo abierto, la mayoría de los presidentes de clubes considera que la Universidad de Costa Rica está en su derecho de jugar en casa frente a la Liga en el Estadio Morera Soto.
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En la asamblea de Unafut se prohibió que esta opción se diera en las últimas dos fechas del torneo y en la cuadrangular; así lo establece el reglamento de competición.
Sin embargo, los clubes pueden jugar en condición de local en la sede de su rival durante el resto de jornadas establecidas, según el artículo 64.
En este caso, por motivo de la despedida y homenaje al exdelantero Jozef Miso, la U decidió jugar en la casa eriza.
El dirigente del equipo florense , Orlando Moreira, afirma que los presidentes de los equipos fueron quienes aprobaron el reglamento, por lo tanto, la UCR tiene derecho de afrontar este cotejo allí.
Moreira no quiso decir si le parece correcta la decisión académica, pues afirma que su equipo también podría vivir una situación similar en algún momento del certamen.
“El asunto es el siguiente: si a mí me propone un equipo que quiere hacer lo mismo en Heredia y está todo en regla, yo le voy a decir que sí, entonces por qué me voy a quejar ahorita. La Universidad está buscando la parte económica”, admitió Moreira.
Mientras, el presidente de Pérez Zeledón, Juan Luis Artavia, está en desacuerdo con esta situación y considera que se debe analizar en la asamblea. Empero, reconoce que la U no está incumpliendo el reglamento.
“Cambiar de sede es darle más ventaja a ese equipo que le está prestando el terreno. No se ve bien. Pienso que lo hacen por un tema económico, pero hay cosas por encima de ese aspecto”, recalcó el dirigente.
Mientras tanto, el gerente limonense, Noel Ferguson, considera que el portillo quedó abierto y, por lo tanto, la UCR tiene toda la potestad para jugar en el Morera Soto, aún cuando esto le dé una ventaja competitiva en la lucha por la clasificación.
El dirigente caribeño coincide con Artavia en que es necesario analizar si esto le conviene a las escuadras, pues podría hacerse un ajuste en el reglamento para las próximas temporadas.
“Hay un artículo de la norma que dicta que para las instancias finales no se puede hacer eso. Si el portillo quedó abierto de esa manera, hay que tratar de normarlo para que quede mejor”, recalcó Noel Ferguson.
En el criterio de los consultados prevalece la idea de que la Universidad tomó esta decisión debido a un tema económico.
En semanas anteriores, el conjunto del alma mater reconoció estar pasando una situación económica complicada.