Con una explicable mezcla de satisfacción y de tristeza por la victoria que se le escapó a Saprissa, Jairo Arrieta y Alejandro Castro coincidieron en que sus respectivas anotaciones constituyen un envión anímico para los dos.
“Volver siempre estimula. Y si es anotando, mucho mejor”, comentó Arrieta. “Eso sí, pienso que lo verdaderamente importante para nosotros era ganar el partido. Lo hicimos todo para triunfar, ustedes lo vieron. Lamentablemente, no pudo ser”.
“En lo personal, este tiempo fuera de la cancha (sanción de tres partidos) me sirvió para reafirmar mi convicción de seguir anotando.
“Por dicha, las oportunidades se me presentan. Y lo que hago es aprovecharlas al máximo”, manifestó Jairo Arrieta.
Entre tanto, luego de vivir algo así como un “exilio” en Santos de Guápiles, las palabras de Jorge Alejandro Castro denotan la intención de mirar solo hacia delante.
“No sé si regresé a Saprissa solo porque no contrataron al Chiqui (Randall Brenes). Lo único que puedo decir es que, mientras estuve fuera de esta institución, alimenté siempre la esperanza de volver. ¡Sabía que iba a volver!
”Esto ha sido cuestión de tiempo y paciencia. Ahora estoy aquí, he vuelto a anotar y eso, para mí, es lo que de verdad importa.
“Puse todo en manos de Dios. Lo demás lo he logrado a puro esfuerzo”, dijo Castro, sereno y sonriente, con su maletín al hombro.