San Isidro de El General. El grito de gol y el brinco con que celebró junto a Leonel Moreira, llevaban impreso un desahogo para Víctor Mambo Núñez, quien ayer provocó un gol y marcó otro en la victoria que consiguió Herediano.
La razón de dicho sentimiento es que a mitad de temporada, el Mambo estuvo a punto de irse del club, pues las cosas no salían y a él lo tachaban de problemático.
“Ha sido un torneo complicado para mí, a la mitad casi quedo fuera del equipo; lo que pasa es que siempre voy a pelear por mis compañeros. Gracias a Dios, me quedé y estoy aportando”, expresó tras el saludo de Moreira.
La picardía y olfato goleador del delantero generaron el primer tanto, que fue autogol de Keilor Soto, y marcaron el segundo, en el que Ismael Gómez realizó una jugada personal y se la dio para anotar.
Sudor. El atacante manifestó que el juego fue complicado porque Pérez Zeledón quiso anotar desde el principio, mas se fue apagando.
“Ellos sabían que íbamos a venir con todo, estaban esperando hacer un gol rápidamente, pero lastimosamente para ellos no se dio”.
Núñez, de 32 años, comentó que el pase a la final sabe muy bien porque hace dos partidos nadie apostaba por la clasificación florense.
“Heredia es un equipo grande, y se ha demostrado. Se vio en Saprissa, donde nadie nos regaló nada, y se volvió a ver hoy (ayer)”, añadió.
“Hubo siete jugadores que no entrenaron en los últimos siete días –por gripe–, y Pepe (José Cancela) y yo no lo hicimos en los últimos tres días, pero acá estamos luchando. Esta mañana (hoy) el profe (Odir Jacques, entrenador) nos dijo que nos ocupaba, se dio la oportunidad y la aprovechamos”, añadió.
A una semana de disputar el primer partido de la final contra Santos, Núñez consideró que será una serie complicada ante un rival al que no han vencido en el torneo.
“Santos es un equipo difícil, por eso está en la final”, comentó.