Desde hace unos días circuló un video del periodista deportivo Josué Quesada, en su programa ‘Teléfono Rojo’, en el que promovió lanzar ‘insultos deportivos’ contra Joel Campbell en el clásico nacional que será el 5 de noviembre, en el Estadio Ricardo Saprissa, y hasta él mismo se ofreció a pagar la multa “por hacerle la vida imposible” al 12 de la Liga.
El comunicador insta a lograr que Campbell sienta “el ácido” apenas pise la gramilla del Saprissa. Externa su deseo de que las graderías se le vayan encima a comérselo. Aunque señala que sin violencia, promueve a hacerlo con abucheos, silbidos e “insultos deportivos”.
Después de mucho análisis, la Junta Directiva de Liga Deportiva Alajuelense decidió que debía tomar cartas en el asunto y optó por vetarlo del Estadio Alejandro Morera Soto.
Esta decisión se dio a conocer unos minutos después de que Alajuelense y Saprissa emitieron un comunicado en conjunto, en el que hicieron un llamado para desterrar insultos, ofensas, racismo y violencia del fútbol.
Ahí, los dos clubes también hicieron partícipe de esta lucha a los medios de comunicación, periodistas, directores de programas deportivos y contertulios, instando a informar y educar con inteligencia emocional, ética y respeto, evitando comentarios que inciten o exacerben la rivalidad y los conflictos entre las aficiones o en contra de los jugadores y miembros de cada uno de los equipos.
Después de eso, la institución rojinegra dio a conocer en otro comunicado que vetaba del Morera Soto al periodista Josué Quesada, quien también labora en Tigo Sports, “debido a sus recientes declaraciones que incitan a la violencia y al irrespeto hacia uno de nuestros jugadores, Joel Campbell”.
La Liga detalló que esto se debe a los comentarios que Josué Quesada manifestó el pasado 19 de setiembre en sus redes sociales.
“Tales irresponsables comentarios, que desean la violencia y el odio en el ámbito deportivo, son inaceptables y van en contra de los valores fundamentales del fútbol y la sociedad en general”, se lee en el comunicado de Alajuelense.
El club rojinegro argumentó que es inadmisible que una figura pública con acceso a los medios de comunicación, y todavía más peligroso, que asiste a los estadios, “promueva la violencia en un momento en el que los clubes y organizaciones deportivas y gubernamentales trabajan arduamente para erradicarla de nuestros estadios”.
Alajuelense añadió que la integridad de los jugadores y el bienestar de los aficionados son prioridad.
“No toleraremos ninguna acción que ponga en peligro su seguridad. Hacemos un llamado enérgico al ente organizador del fútbol en Costa Rica, Unafut, para que tome medidas con respecto a la conducta del señor Quesada.
”Es fundamental que se aborden y se sancionen públicamente comportamientos que promuevan la violencia en los eventos deportivos. El periodismo deportivo debe ser una herramienta constructiva para fomentar el respeto, la pasión y la admiración por el deporte, no un medio para propagar odio y violencia”.
La Nación contactó al periodista Josué Quesada para conocer su reacción ante esta decisión de Alajuelense.
“No tengo más que decir que lo que digo en el video y ahí la gente tendrá la comprensión y la interpretación de lo que yo digo”, afirmó Josué Quesada.
En ese mismo comunicado, la Liga señaló que promueve un ambiente deportivo seguro y respetuoso. Así que aparte de vetar a ese comunicador, Junta Directiva del club condena de manera enérgica los comentarios racistas que sufrió Freddy Góndola en el partido contra Guacasteca.
“Solicitamos que este hecho no pase por alto y se tomen las medidas y sanciones correspondientes. Respaldamos a nuestro jugador y como institución lo acompañaremos en todo momento”, señaló Alajuelense.