La dirigencia de Liga Deportiva Alajuelense reacciona con furia al conocer el veredicto del Tribunal de Apelaciones de la Federación Costarricense de Fútbol.
Ese órgano rechazó los recursos presentados por el club y mantiene en firme los castigos de dos meses a Barlon Sequeira y de cuatro juegos a Jonathan McDonald, basados en lo que dicta el reporte arbitral de Henry Bejarano, quien disparó tres cartulinas rojas finalizado el polémico partido entre Herediano y la Liga (3-3).
La noche del 8 de marzo, Bejarano disparó rojas. En la cancha expulsó a Kenner Gutiérrez, quien asegura que le dio la mano y le dijo que no era penal. Además, le mostró esa cartulina a Barlon Sequeira, luego de que el asistente Octavio Jara le dijo que lo había agredido.
De hecho, en el reporte arbitral consigna que el jugador fue expulsado “por golpear en la espalda con su pecho al asistente número 1” y la expulsión al atacante fue en el camerino de la Liga, “por referirse al cuarteto arbitral con lenguaje ofensivo”.
Sequeira ya descontó una semana, mientras que McDonald aún debe saldar tres jornadas, eso a partir del momento en el que se reanude el torneo que entró en pausa desde el 17 de marzo debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
“Es lamentable que no tuvieran las agallas para dejar al descubierto una mentira y no tenemos otra alternativa que sacar a los mentirosos. Eso es lo que deduzco de esta sentencia, porque está clarísimo en todas las pruebas que presentamos y lo vio el país, no solamente 20 o 30 personas, porque en el caso de Barlon Sequeira nunca hay una ofensa y si se escudan en un formalismo por la falta de capacidad para discernir la capacidad real, o sacamos a los jueces o a los mentirosos y yo diría que primero a los mentirosos y después a los jueces incompetentes”, expresó el directivo e integrante de la comisión legal de la Liga, José Cabezas.
Al consultársele si Alajuelense puede intentar algo más, o si ya dan por cerrado este capítulo, el abogado respondió: “En vía directa, o en vía vertical no, pero que por supuesto esto es la gota que derramó el vaso y vamos a buscar otras instancias en donde sea para que los mentirosos queden al descubierto y que no sigan en el fútbol de Costa Rica, porque hoy es la Liga, pero mañana pueden poner su dardo en contra de cualquier otro equipo”.
Un tema de debate entre aficionados ha sido la sanción de Sequeira, al ser en tiempo y no por juegos.
La Fedefútbol informó de que la sanción se descuenta con el campeonato sobre la marcha y Cabezas dice que esa apreciación es correcta.
“Hay una regla específica que dice que si se suspende el torneo, se suspende la sanción. Sin embargo, yo pienso que la sanción debería de ser por tiempo. Está esa regla y entonces hay que reconocer que eso es lo que procede”.
Cabezas también dijo que semanas atrás, tanto Barlon Sequeira como Jonathan McDonald se reunieron con Francisco Dall’Anesse para estudiar si interponían una demanda, al sentirse perjudicados y acudir a la vía civil.
“La reunión se dio, pero se vino el problema de la pandemia, el cierre de la Corte y los cierres parciales y totales de los tribunales provocaron que eso quedara pendiente, pero yo pienso que el licenciado Dall’Anesse está en total disposición de llevar estos casos a otras instancias, porque una mentira es una mentira y una mentira de este calibre no solo afecta el fútbol, trasciende las fronteras y estoy seguro de que se va a dar”, citó Cabezas.
Otro factor que molesta a la Liga es el tiempo que se demoró el Tribunal de Apelaciones en dar una respuesta, pues considera que pudieron sesionar de manera virtual desde hace semanas.
“Eso da para mucha especulación y suspicacias. Entonces no sé si es que el Tribunal no tiene la capacidad, o no tiene las agallas, porque ahí lo está demostrando. Me parece que esa tardanza deja mucho que desear”, indicó el directivo rojinegro.
De acuerdo con el fallo dado a conocer por la oficina de prensa de la Fedefútbol: “El Tribunal de Apelaciones confirma el acuerdo tomado por el Tribunal Disciplinario, ya que de conformidad con los artículos 80 párrafo segundo y 102 párrafo tercero ibídem establecen que los informes del árbitro dan plena fe de lo reportado para el Tribunal Disciplinario y de conformidad con la misma norma, la única manera de desvirtuar un informe arbitral es mediante un procedimiento sumario de investigación y no a partir de un recurso de apelación”.