Afición rojiamarilla recibió con aprecio a Odir Jacques

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Heredia. Con su conocida y tradicional indumentaria de jacket y pantalón negro, camisa del mismo color, tenis blancas y su inseparable gorra, el ahora técnico del Cartaginés, Odir Jacques, volvió a la gramilla del estadio Eladio Rosabal Cordero.

Previo al arranque del encuentro, el estratega brumoso dijo a La Nación que se sentía feliz de retornar al recinto florense.

“Me siento feliz de estar de nuevo en esta gramilla, aunque ahora en otras condiciones”, declaró el brasileño.

Odir ingresó a la gramilla sintética del estadio rojiamarillo 20 minutos antes de iniciarse el encuentro y recibió el aprecio de los aficionados heredianos que ya esperaban el pitazo inicial.

En el ingreso oficial, y con el aforo del estadio casi en su totalidad, los seguidores del Team se pusieron en pie para saludar y darle la bienvenida a quien los llevó a alcanzar el cetro número 22 de la historia del Herediano.

Después de un breve saludo con su colega, Claudio Jara (nuevo técnico Herediano), Odir respondió a las muestras de cariño de la gente con una sonrisa y un gesto de saludo con sus manos.

“La verdad que Herediano fue mi casa por muchos años, estuve en cuatro finales y todas las gané. La gente de Heredia es gente que me admira, yo les tengo cariño y respeto”, señaló el técnico brumoso al finalizar el partido.

Agregó: “Me recibieron súper bien. Me aplaudieron. Hablaron conmigo, pero hasta ahí. Una cosa es la afición y Herediano y otra, soy yo, el técnico de Cartago”.

Durante el juego se mantuvo tranquilo, de brazos cruzados. Cuando Yendrick Ruiz abrió el marcador para los florenses, Odir soltó los brazos por un instante y se fue a sentar unos minutos.

Con el gol del empate, Jacques solo se quitó la gorra y por un lapso muy breve celebró con algunos de los jugadores que estaban en el banquillo brumoso.

Tributo. “Gracias Odir”. Con esa leyenda impresa en su camisa, Carlos Salas llegó al Rosabal Cordero a disfrutar del partido entre su equipo y el once del Cartaginés.

Salas es de sangre rojiamarilla y decidió ponerse la camisa como muestra de agradecimiento al extécnico de los florenses.

“Dicen que es de bien nacido ser agradecido. Yo estoy muy agradecido con Odir por los cuatro campeonatos que le dio al Herediano”, explicó Salas.

“Nosotros (los seguidores del Club Sport Herediano) somos agradecidos; así fue cuando Jafet (Soto) y Orlando (De León) se fueron, y eso que ellos no nos dieron campeonatos, Odir sí”, terminó.