Afición del Saprissa no perdonó a varias de sus figuras en los últimos juegos

En los últimos cuatro compromisos del equipo como local, los seguidores morados silbaron a varios de los jugadores; pero también los apoyaron cuando hicieron las cosas bien.

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Tibás.

La afición del Saprissa no perdona un error, ni una mala definición ni mucho menos un mal pase que pueda comprometer al equipo.

El famoso Monstruo de mil cabezas se ha encargado en las últimas semanas de llevar a sus jugadores del cielo al infierno, o viceversa.

Lea también: David Guzmán: 'No me sorprendió que me silbaran, estaba haciendo un mal partido'

Cuando el equipo juega bien, alienta como nunca, pero cuando falla, el estadio se llena de silbidos.

En los más recientes compromisos del equipo como local, desde el estreno de la gramilla natural, los seguidores morados silbaron a varios de los jugadores, pero también los apoyaron cuando encontraron un buen fútbol.

Por ejemplo, ante Santos de Guápiles, los tibaseños, líderes en asistencia en lo que va del torneo, se concentraron en abuchear al volante de contención Néstor Monge en la segunda parte, luego de que este fallara en dos pases seguidos y además recibiera un caño del santista Kenneth Cerdas, que terminó en el gol de Víctor Núñez.

Misma situación vivió el volante una semana después ante Herediano. Los seguidores también la emprendieron contra el "20" morado.

Mientras que en el choque ante el W Connection de Trinidad y Tobago, el crucificado fue el delantero Mynor Escoe, quien después de errar nueve opciones claras de gol, salió completamente silbado por todas las graderías de la Cueva.

Otro que no se escapa de la molestia de la afición es Deyver Vega, baluarte en la obtención del título 31.

El atacante ha sido blanco de críticas y chiflidos por su bajo nivel en el campo, e incluso la afición aplaudió cuando lo relevaron en el medio tiempo ante el Santos de México.

El caso más reciente lo vivió David Guzmán, uno de los jugadores líderes y figura del plantel. El seleccionado fue víctima de las reprimendas de una afición que no le toleró los constantes pases malos y pérdidas de balón ante los aztecas, por el torneo de la Concacaf.

El mismo mediocampista reconoció que los silbidos contra él estaban justificados. " No me sorprendió (que lo silbaran) porque estaba haciendo un mal partido, lo reconozco, estaba haciendo un partido donde no tenía la pelota, y bola que recuperaba, bola que perdía", mencionó.

En ese mismo duelo, Daniel Colindres cambió los abucheos cuando estaba calentando por aplausos, tras el sobresaliente nivel mostrado en la cancha.

"Los aficionados pagan su boleto, hacen su show dentro del estadio y por eso nos apoyan. Entiendo al aficionado y pagan para exigirnos a nosotros y eso está bien, lo entiendo y lo respeto y es bueno, no solo de mi parte sino de varios compañeros igual", agregó Guzmán.

Para Jeaustin Campos, timonel saprissista, Saprissa "moriría sin su afición", por eso hay que entenderlos cuando algo nos les gusta.

"El aficionado es muy emotivo, muy exigente y creo que Saprissa moriría sin ese empuje de los aficionados. El respaldo en los momentos difíciles es importante. Un jugador que está en Saprissa tiene que estar acostumbrado a este entorno. Acá no hay grises, el aficionado tiene todo el derecho a expresarse. Te mete por las buenas o por las malas. Obviamente prefiero que nos apoye, pero es un ingrediente que está ahí", expresó.

Por su parte, para el defensor Andrés Imperiale la afición del Saprissa no debe influir en el comportamiento del plantel.

"La afición es pasional, se impacienta cuando las cosas no salen, debemos estar tranquilos cuando las cosas no salen. Ellos no juegan y ahí es donde el equipo tiene que tener la madurez para resolver un juego", agregó.

Por último, para algunos exjugadores del Saprissa que jugaron a estadio lleno, la hinchada de la S es la más exigente del país.

"Ellos buscan la manera de que el equipo gane, a ellos no les importa si te tienen que aplaudir o putear, solo quieren ver al equipo ganar. E l aficionado se maneja por resultados. A ellos solo les importa el momento y ya", expresó el lateral izquierdo del Cartaginés Michael Barquero.

Barquero agregó que "cuando pasé de Belén a Saprissa sí lo sentí bastante. No es bonito estar jugando y que 18 mil personas estén en contra de uno, pero uno como jugador debe mantener la calma y concentrarse en el juego", manifestò.

Randall Azofeifa, volante del Herediano, coincide con Barquero. "La afición se acostumbra a algo, parten de un punto hacia arriba, máxime si el equipo ya fue campeón, la afición siempre quiere que el equipo juegue bien, de una u otra forma el aficionado no está en contacto con el aficionado diario y solo le interesa ir al estadio y salir de ahí con una victoria, su mayor interés es que Saprissa gane y no pierda", expresó.