Se acabó la temporada para Darryl Parker. El que parecía un inicio soñado para él, siendo estelar del Cartaginés y con actuaciones muy destacadas, terminó en pesadilla.
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Parker se sometió a una resonancia magnética, después de sentir molestias en la rodilla derecha, durante el partido del sábado anterior contra Saprissa. Lamentablemente, las noticias no podrían ser peores:estará entre ocho y nueve meses fuera de las canchas.
Leonardo Vargas, gerente brumoso, confirmó que: “Efectivamente tiene una ruptura del ligamento cruzado. Ya le hicimos todos los exámenes respectivos y se vio que es esta situación. Es lamentable lo que ocurrió”.
Darryl fue clave en el buen inicio de los blanquiazules en el torneo local y la Copa Centroamericana. El meta aprovechó la oportunidad que le dio Paulo César Wanchope y era el más sobresaliente de su equipo, por encima de figuras como Jeikel Venegas y Marcel Hernández.
El cancerbero disputó seis de los nueve partidos que tienen los de la Vieja Metrópoli en la temporada (cuatro de los cinco del club en el Apertura 2023 y dos de los tres en el certamen del área). No obstante, ahora deberá pasar por el quirófano.
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Los centenarios deberán definir la fecha en la que se da la operación y a partir de ese momento iniciará el largo proceso de recuperación para el futbolista de 30 años.
Parker es el tercer jugador del Cartaginés que sufre esta lesión en el último año y medio. El primero fue Víctor Murillo, quien ya superó el problema y volvió a jugar, mientras que Bernald Alfaro de a poco efectúa trabajos en cancha y estaría al 100% hasta la próxima temporada.
Ahora el dilema para Wanchope y la dirigencia es si fichan a un cancerbero más o si se quedan con Briceño y con el juvenil de 18 años, Cristopher Moya. El técnico ha manifestado que se siente muy confiado con este departamento, pero se quedó sin una ficha clave.