España ve un poco más cerca el Mundial de Catar-2022 tras ganar 1-0 a Grecia este jueves en el Estadio Olímpico de Atenas, poniéndose líder del grupo B antes de enfrentarse a Zlatan Ibrahimović y Suecia el domingo.
Un gol de penal transformado por Pablo Sarabia (26) permitió a España situarse en la primera plaza de la llave, la única que da acceso directo a Catar, por delante de Suecia, que perdió sorpresivamente este jueves 2-0 con Georgia con Zlatan en la cancha.
Los españoles aventajan en un punto a los suecos, con lo que les bastaría un empate el próximo domingo en el estadio de La Cartuja sevillano para sellar su viaje al Mundial del próximo año.
Grecia, que aspiraba a luchar por el segundo puesto del grupo para entrar en la repesca de la que saldrán los tres últimos clasificados europeos, se quedó definitivamente sin billete a Catar, tras no haber estado tampoco en Rusia-2018.
Los españoles salieron al campo del Estadio Olímpico ateniense dispuestos a monopolizar el juego, ante una Grecia, que se encerró atrás a la espera de sorprender con contraataques rápidos y balones a Evangelos Pavlidis y Giorgos Masouras, sus dos hombres más adelantados.
La Roja puso asedio a la portería griega, pero le costaba superar la muralla levantada por los locales, que sólo dieron un paso adelante tras verse por detrás en el marcador.
Tras un gol anulado a Masouras por fuera de juego (21), el debutante Raúl de Tomás dio el primer aviso con un disparo a la media vuelta en el área desviado por un defensa (23).
Y poco después, una falta cometida sobre Iñigo Martínez fue sancionada con un penal transformado por Sarabia (26), que hizo su quinto tanto con la camiseta nacional.
España pudo ampliar la cuenta antes del descanso, pero Morata perdió un mano a mano con el portero Odisseas Vlachodimos (36).
Sin nada que perder, Grecia avanzó líneas tras el descanso intensificando su presión y llegando más al área de Unai Simón.
La mayor intensidad y velocidad impuesta por los griegos convirtió el encuentro en un intercambio de golpes.
En el último cuarto de hora, España trató de calmar el juego con posesiones largas y presionando a los griegos lejos de su portería para acabar llevándose una victoria vital.