Podría considerarse fácilmente como la entrada más salvaje en el fútbol. Lo que hizo André Orellana en Honduras merecería hasta habilitar una tarjeta de otro color, porque la roja que recibió se quedó corta.
Orellana, futbolista del Marathon, perdió la cabeza por completo y de la nada se lanzó de frente contra dos figuras del Olimpia. André voló con su pierna estirada e impactó a sus rivales, quienes se salvaron de sufrir una lesión más seria.
Incluso, el árbitro del partido no dudó ni un segundo y de inmediato lo expulsó. El propio jugador tan siquiera reclamó y los narradores catalogaron lo sucedido como “inconcebible a nivel profesional”.
Lo más extraño es que la acción se presentó en el minuto 88, en un compromiso que se encontraba 1 a 0 a favor del Olimpia y que terminó con este resultado.