Sao Paulo
El Santos brasileño demandó ante la FIFA al FC Barcelona y a su atacante Neymar por supuestas irregularidades en su traspaso realizado en mayo de 2013.
El presidente del Santos, Modesto Roma, quien asumió el cargo en enero, explicó este viernes que la demanda incluye también a Neymar da Silva Santos, padre del capitán de la selección brasileña, y su empresa Neymar Sports e Marketing Ltda.
"El Santos considera que el Barcelona, Neymar y su empresa cometieron violaciones del contrato de transferencia y reclama una indemnización por los daños, además de los intereses", explicó Roma en rueda de prensa.
El club brasileño pretende así recibir su cantidad correspondiente al traspaso del jugador, en base a la suma real de la operación (€83,3 millones, como mínimo, según la Justicia española y no a los €57 millones declarados en principio por el Barça).
"El 31 de mayo de 2013, el Santos y los antes citados firmaron un contrato de transferencia y cesión de los derechos económicos y federativos (de Neymar) por €17,1 millones, más una parcela de €2 millones, en caso de que el jugador fuera finalista del premio FIFA al mejor del mundo. Pero, tras la investigación en España, el Santos tomó conocimiento de que los valores ascendían a €83,4 millones", continuó el jerarca en la sala de prensa de Vila Belmiro.
Con la voz quebrada, el dirigente aseguró que el equipo no está persiguiendo a uno de sus ídolos, sino que quieren defender sus intereses, por lo que el club tenía que denunciar a todas las partes implicadas en el polémico y millonario traspaso.
"El Santos es más grande que las partes que lo conforman. Respetamos a todos y a sus imágenes, pero necesitamos resarcir los perjuicios causados al club", argumentó Roma.
La decisión pasa ahora a manos del Comité de Arbitraje de la FIFA, que determinará quién tiene la razón. La parte derrotada podrá recurrir luego al Tribunal del Arbitraje Deportivo (TAS), explicó la abogada del club Fátima Bucker.
Neymar, de 23 años, integra un poderoso tridente ofensivo del Barcelona junto al argentino Lionel Messi y el uruguayo Luis Suárez, quienes se preparan para jugar la final de la Champions League el 6 de junio frente a Juventus.