Canadiense y estadounidense quitan y ponen árbitros en Concacaf

Dos personas toman las decisiones pese a que hay un Comité de Árbitros

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Una canadiense y un estadounidense quitan y ponen a los árbitros que participan en los torneos de Concacaf, entre ellos, la Copa Oro 2015.

La principal responsable de los nombramientos es Sonia Denoncourt, quien desde diciembre pasado ocupa el puesto de directora de arbitraje del área.

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Ella, junto a Bryan Hall, (exárbitro estadounidense cercano a la cúpula de Concacaf), son quienes están detrás de las polémicas designaciones de Mark Geiger y Wálter López, silbateros que incidieron en las derrotas de Panamá y Costa Rica en el certamen regional.

Denoncourt es la cara visible del arbitraje de la región, pero junto a ella figura Hall con la asesoría del también estadounidense Essee Baharmast.

Con un rango menor pero con injerencia está el costarricense-caymanés Alfredo Whittaker, actual miembro de la Comisión de Árbitros de FIFA.

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“Ella (Denoncourt) tiene asesores arbitrales con mucha influencia y en general son los responsables directos de todo lo que está pasando en el torneo”, indicó a La Nación un silbatero que pidió reservar su identidad.

“El arbitraje de Concacaf está dominado por los gringos y canadienses”, afirmó la fuente citada, quien recalcó que en las designaciones arbitrales siempre hay intereses de por medio pero no se atrevió a asegurar que a los silbateros les pidan arreglar un juego.

“Hay un padrinazgo muy fuerte y a ese nivel es más fácil disimular las cosas. A veces creen que porque el árbitro es mundialista es la mejor opción y ahí está el ejemplo de Geiger”, apuntó.

La canadiense ocupa el puesto de directora de arbitraje gracias al apoyo de Jeffrey Webb, expresidente de Concacaf, quien está involucrado en el escándalo de corrupción que sacude a la FIFA.

Otro gringo a la cabeza. Con “menos” poder pero igual de relevante está la influencia del Comité de Árbitros de la Concacaf, encabezado por Sunil Gulati, presidente de la Federación Estadounidense de Fútbol, y el hondureño Alfredo Hawitt, jerarca interino de la Concacaf.

Ellos se hacen acompañar por varios miembros, entre ellos el costarricense Rodolfo Villalobos, tesorero de la Federación Costarricense de Fútbol.

Villalobos indicó ayer a este diario que el Comité “prácticamente es político” y que no ejerce funciones claras pues no analiza los fallos de los árbitros y solo toca temas generales.

“Esta organización no funciona como tal. No tiene ninguna vinculación el tema de nombramientos de los árbitros con los torneos. Siempre lo he reclamado, es una comisión que se reúne una vez al año”, recalcó.

Villalobos dijo que valora renunciar a su puesto si no se corrige el rumbo de este órgano.