El informe de labores del presidente Chaves en la Asamblea Legislativa resalta los buenos resultados en este primer año de gobierno. Sobre todo, en cuanto al estado de la economía. Pero, como todo político, don Rodrigo pone de relieve lo que le conviene y no muestra lo que no quiere.
Nos dice que el desempleo bajó del 13 al 11 %, pero omite mencionar que a febrero del 2023 había 45.000 personas menos trabajando que en mayo del 2022. Hay menos desempleo porque la gente se cansó de buscar trabajo y no encontrarlo, no porque haya más gente empleada.
La inflación bajó del pico alto en agosto, lo cual es bueno por el alivio que representa para las familias. Pero el presidente no explica que, en buena parte, eso se debe a factores externos, como los vaivenes de los precios internacional de materias primas. Tampoco menciona lo sucedido con el tipo de cambio que, si bien puede ayudar a bajar la inflación y da un respiro a los deudores en dólares, daña la competitividad del país a mediano plazo y su capacidad para exportar y atraer turistas. Precisamente las actividades que más están ayudando al crecimiento de la economía.
Don Rodrigo resalta que las finanzas públicas han mejorado sustancialmente. Lograr un superávit primario, y con ello reducir la relación deuda pública sobre PIB es bueno para el país. No solo reduce la carga de intereses del Gobierno, sino que también alivia la presión sobre las tasas de interés para los deudores privados. Este logro da mérito a la disciplina fiscal de este gobierno, aunque el presidente omite dar crédito parcial a la aprobación de leyes fiscales durante la administración pasada.
Nos dice el presidente que la economía crece a buen ritmo, por encima del promedio de Latinoamérica. Pero no dice que la producción del régimen definitivo (regular), que es la mayoría, está estancada. El impulso a la producción viene, en gran parte, de las empresas en zona franca, muchas de las cuales vinieron al país gracias a la labor conjunta del trinomio Comex-Procomer-Cinde.
Por eso, extraña que el gobierno haya decidido romper el convenio, que si bien se puede mejorar, venía haciendo un buen trabajo. El mismo informe de labores del presidente destaca que en el 2022 ingresaron 63 nuevas empresas al país, un 17 % de ellas fuera de la GAM. Parece que en esta decisión faltó hacer un análisis de costo-beneficio.
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El autor es economista.