Mónica Malavassi, la deportista todoterreno que se convirtió en educadora

Mónica Malavassi representó al país en fútbol y baloncesto, pero más allá de su faceta deportiva desarrolló su faceta formadora

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Mónica Malavassi destacó desde muy joven como deportista. Fue seleccionada nacional tanto en fútbol como en baloncesto, disciplinas que le abrieron la oportunidad de estudiar en Estados Unidos. Sin embargo, debido a la fuerte tradición familiar, también tuvo un vínculo muy arraigado con otra pasión: la educación.

Malavassi proviene de una familia de destacados educadores, en el cantón de Coronado, que influyeron en Mónica y sus hermanas.

Para comprender esa herencia, es necesario hablar de doña Amadita Rojas (q.d.Dg), abuela de Mónica, una de las impulsoras de la educación en Coronado, directora durante décadas de la escuela José Ana Marín. Fue nombrada en 2016 ‘Hija predilecta del cantón’.

Hoy, la escuela Amadita, un centro educativo privado, lleva su nombre y está a cargo de la familia Rojas Malavassi. En ella, la educación tocó la puerta de Mónica, quien admite que desde muy joven sintió un gran deseo por ayudar a la niñez.

“Mi familia es de educadores, siempre quise ser maestra. Terminé el colegio y entré a estudiar en la UCR la carrera de Educación Primaria, pero surgió la oportunidad de irme a Estados Unidos y cambié a la carrera de Gestión Deportiva”, recordó Malavassi.

En la actualidad, Mónica, además de ser la cabeza del proyecto Futbol Consultants de la Liga de Ascenso y la directora deportiva del Herediano Femenino, también es la directora deportiva de la Escuela Amadita y el Colegio Emva.

“Mi mamá ha sido la directora por mucho tiempo, mi abuelita también fue una de las fundadoras del Liceo de Coronado, una de mis tías estudió educación, mi papá dio clases de física, yo crecí con eso. Entonces, la verdad, es algo que me apasiona. En la escuela tengo a cargo el comité de disciplina. Me apasiona, porque es una forma de educar de manera positiva”, recalcó.

El deseo de Mónica por educar fue tal que, en sus inicios, antes de su viaje a Estados Unidos, se desempeñó como asistente de maestras en los grados de preescolar.

Fue en Estados Unidos donde unió dos elementos que le apasionaban mucho: el deporte y la educación.

“Allá conocí la NCAA (National Collegiate Athletic Association), una asociación que agrupa a muchas universidades y promueve el estudio y la competitividad deportiva. Este sistema me enseñó cómo ser profesional y que te paguen con el estudio. Eso me encantó. Fue entonces cuando, estando en Estados Unidos, comenzamos a aplicar cosas en Amadita”, recordó.

A pesar de que Malavassi tiene dos años avanzados de la carrera de educación, ve difícil finalizarla, aunque no lo descarta.

“En algún momento tenía ese plan. Hice dos años y medio de educación en la UCR, pero honestamente la vida me llevó por este camino del deporte. Tengo los programas deportivos de la escuela y el colegio, pero se me han desarrollado proyectos de gestión deportiva como Futbol Consultants”.

En la actualidad, la presidenta de Futbol Consultants tiene a su cargo programas deportivos para 400 niños de primaria y 150 estudiantes de secundaria.

“Es una de las facetas que más me apasionan y disfruto. Amo mi trabajo, amo compartir con los chicos y sentir que se está sembrando en ellos una semilla que les acompañará toda la vida. Es una forma de colaborar con el mundo”, finalizó.