‘Llegué hace 20 años huyendo de las drogas’

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

María Mesén, de 67 años, llegó a La Carpio hace dos décadas. Salió de Paso Canoas, en la zona sur, huyendo de las drogas y buscando un mejor futuro para sus tres hijos.

Hoy cree que esa meta se cumplió. Sus hijos crecieron, tienen un trabajo y, con su ayuda, convirtió el rancho de latas y madera que había levantado al llegar, en una casa de cemento.

La familia de doña María es una de las 33 que lograron obtener un título de propiedad luego de siete años de espera.

Ahora la mujer dice estar tranquila , pues sabe que heredará algo a sus nietos. “Cuando me dieron la escritura sentí un gran alivio, una alegría inmensa, algo que no puedo explicar”, recordó.

Sus 20 años de vida en el precario le dan potestad para hablar sobre el lugar.

“Muchas cosas han cambiado. Antes había más pobreza, pero menos problemas, menos delincuencia”, dijo.

No obstante, reconoce que, en otros aspectos, ha habido grandes mejoras en el sitio.

“Antes teníamos que ir hasta canal 13 a recoger agua, no había buses, todo pasaba lleno de polvo porque no había calles asfaltadas y tampoco teníamos electricidad”, relató la mujer.

De acuerdo con Fuprovi, el 32,5% de los hogares en Ciudadela La Carpio está dirigido por una mujer.

El 57% está bajo la responsabilidad de un hombre y en el 10% de los casos hay una administración compartida.