Una buena partida para la Casa del Dominó

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En una esquina de barrio Roosevelt, decenas de limonenses se reúnen todas las tardes para lanzar las fichas del dominó, arreglar el fútbol nacional, los problemas de la política y hasta sus líos personales.

El tiempo en la Casa del Dominó se consume entre partidas y una que otra bebida camufladas para aliviar el calor y elevar el ánimo.

Sin embargo, por más de diez años, los asiduos asistentes han esperado por una reconstrucción del deteriorado inmueble.

La noticia, finalmente, les llegó ayer de boca del presidente Luis Guillermo Solís, quien aseguró que invertirán ¢195 millones en la histórica casona .

Sin una fecha precisa, personeros de Junta de Administración Portuaria y Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) informaron de que los trabajos comenzarían en los próximos días y tardarán unos cuatro meses.

Según contó Guillermo Cole, uno de los más veteranos jugadores, las promesas de arreglar este edificio surgieron en el gobierno de Abel Pacheco.

Más tarde, los planes se incluyeron en el proyecto Limón Ciudad Puerto, sin que nada ocurriera.

Cole, de 75 años, es uno de los que recoge contribuciones entre los visitantes para pagar la luz, el agua, cambiar los tableros y las fichas de dominó.

“Estamos muy felices de saber que ya, por fin, se va a hacer una casa nueva ”, expresó Alejandro Aguilera, quien va a la Casa del Dominó cuando sale de su trabajo.

“Yo tengo más de 30 años de jugar dominó aquí (...) Venimos a quitarnos el estrés”, afirmó.

El inmueble, construido por trabajadores de la empresa Norden allá por 1960, mantendrá una arquitectura estilo caribeño y tendrá un pequeño anfiteatro.