El aumento de entre 4% y 5,14% aprobado este jueves por el Gobierno para los empleados del sector público, no implicará recortes en programas de inversión social.
El viceministro de Egresos del Ministerio de Hacienda, José Francisco Pacheco, afirmó que hay dinero para asumir el costo de la planilla de los funcionarios.
“Se contempló esta alza cuando hicimos el presupuesto, sin que signifique recortar fondos de programas de bienestar social que están vigentes por ley”, dijo Pacheco.
Por su parte, el ministro de Trabajo, Víctor Morales, señaló que “son acuerdos viables dentro de las posibilidades presupuestarias del Gobierno. Analizamos que no tuviera impacto en el déficit”.
El pago de la planilla de 128.000 funcionarios del Gobierno Central representa un costo semestral de ¢38.000 millones.
El nuevo ajuste será diferenciado, de manera que los trabajadores que ganan más del salario mínimo (¢381.200) recibirán el incremento del 4%, en tanto quienes tienen ingresos iguales o inferiores a ese monto, recibirán el alza del 5,14%.
El sector sindical se mostró complacido con el aumento. La Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP) afirmó que si el alza implicara recortes en inversión social, lo denunciarían.
“El déficit fiscal no es un asunto técnico, sino ideológico, que mide el gobierno de turno. Si implicara recortes para bien social, protestaremos contra eso”, dijo Albino Vargas, secretario general de ANEP.