El malestar del sector industrial respecto al costo de la factura de electricidad obliga al ICE a tomar medidas para abaratar tarifas y recuperar competitividad.
De esa realidad está consciente el presidente ejecutivo del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), Teófilo de la Torre, quien reconoce una baja en el crecimiento de la demanda de electricidad y asegura que hay medidas que la institución debe asumir para ofrecer mejores tarifas.
¿Evalúan trasladar costos de la factura industrial a la doméstica para solventar el descontento que hay en ese sector?
Bueno, la propuesta de ellos es así: que se les traslade la pérdida de las compañías eléctricas a los consumidores de uso doméstico y al sector comercial, oficinas y empresas de gobierno.
¿Cuál es su posición?
Debe hacerse pero con mucho cuidado y tal vez en etapas, de forma progresiva y no violenta, para afectar lo menos posible.
Hay empresas que hablan de trasladar sus operaciones. ¿Es Costa Rica menos competitivo en materia de electricidad?
Sí, definitivamente somos menos competitivos y las preocupaciones son mutuas, tanto del sector industrial como nuestro. Todo está subiendo en este mundo. Hay inflación, devaluación; entonces los bienes y servicios se encarecen.
”Con el problema de la sequía y de que hubo plantas hidroeléctricas en el pasado que no entraron a operar a tiempo, ahora estamos pagando la consecuencia. Yo espero que vaya a a ser una burbuja que va a ir bajando. Las industrias dicen que la energía es más barata en otros países, pero hay que considerar que ahí cuentan con petróleo, carbón y gas natural y eso hace que el costo sea más bajo”.
Con esto, ¿cree usted que el país deba apostar a un inicio de exploración de petróleo?
Sí, ¿por qué no? Por lo menos debería haber una acción en el gas natural que ayude a mermar el escalamiento de precios. No es algo que se vaya a lograr en el corto plazo porque son procesos que duran años, pero me parece que es tirar en la dirección correcta.
¿Ha bajado el crecimiento de la demanda de electricidad ?
Este año está fatal; anda en un 1% de crecimiento. El año pasado el crecimiento de la demanda fue de un 4%. Eso, en miles de colones, equivale a un total de ¢18.000 millones menos de lo que esperábamos recaudar.
¿Qué factores propiciaron esa caída en la demanda?
La situación económica del país. Este año la gente ha ahorrado energía en casas, en comercios y en industrias. Las industrias venden menos y, por ende, hay menos consumo de electricidad. El sector que más ha crecido en demanda de electricidad es Santa Cruz de Guanacaste, cuya actividad turística está aportando de forma considerable.
¿Qué está haciendo el ICE para mermar el costo de la energía?
Lo primero es que entren a operar las plantas hidroeléctricas que están en lista. Algunas son propias, otras son privadas, otras están en manos de cooperativas. Esas plantas van a independizarnos más del consumo de combustibles.
”Otra es la renegociación de las deudas. Este año renegociamos unos $380 millones de dólares que se reflejarán en la factura; lo mismo con los fideicomisos. El tercer punto es el ahorro de gastos de operación del ICE, que incluye el recorte de gastos de la institución y la liquidación de 1.800 empleados de una planilla de 15.000. Los frutos de eso vienen el año siguiente.
Tomando en cuenta que en los últimos siete años el costo de arrendamiento de obras ha subido un 40%, ¿cómo ha afectado eso el peso de la factura?
Estamos haciendo ajustes de forma permanente. La planta del Reventazón, que estaba prevista para el 2014, entrará hasta el 2016. Se valoran todos esos cambios en función del ritmo de crecimiento. Las inversiones hay que pagarlas. Por eso hay que mantener muy parecido el gasto de las inversiones con el crecimiento de la demanda.
”Está el mecanismo de exportar energía a otros países de la región cuando nos sobre. Lo que pasa es que a la fecha no ha sobrado mucho debido al impacto de las sequías”.
¿Qué impacto tendría la venta de energía a la región en el costo de la factura eléctrica?
Con las proyecciones que hacemos a mediano plazo, de unos cinco a diez años, la idea es abaratar un 15% la factura. Esa planta probablemente va a generar un excedente muy importante, de manera que estamos buscando futuros compradores.
La Cámara de Industrias critica que el ICE está incurriendo en gastos mayores a los previstos en energía térmica ¿Por qué? ¿Qué medidas toman para enfrentar ese escenario?
No generamos más allá de lo necesario para evitar un racionamiento. Es decir, primero se usa toda la energía renovable del país, y si todavía falta, se coloca la térmica. Este año se tuvo que operar las plantas de diésel por el tema de las sequías y esto es un proceso mucho más caro. Hace un mes, el ICE no genera nada térmico.
¿Se ha dado migración de las empresas en busca del distribuidor más baratos en el país?
Sí. Si yo fuera empresario y me dicen que cruce la calle y tengo energía más barata, yo cruzo. Las ocho distribuidoras del país le compran al mismo precio al ICE, pero algunas tienen generación propia y eso abarata el costo.