El lunes fue un día importante para Mario Fernández: en la mañana se juramentó como oficial municipal de tránsito, y después inició su primer día de la práctica supervisada, en la que le correspondió patrullar la avenida segunda josefina, entre las calles 11 y 13.
Fernández tiene 14 años de desempeñarse como policía municipal de San José, y a partir del 13 de diciembre, cuando se gradúe, formará parte de un grupo de 103 oficiales municipales que apoyan a la Policía de Tránsito en el control de las a veces caóticas vías cantonales.
La generación que se graduará la próxima semana consta de 23 oficiales: 6 de Heredia y 17 de San José. Para ambas municipalidades, este será su segundo grupo de tráficos.
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Los otros cantones que cuentan con policías municipales de tránsito son Belén, San Rafael de Heredia, Barva, Santa Ana, Mora, Desamparados, Alajuela, La Unión, Cartago, Santa Cruz y Garabito.
Ellos tienen las mismas facultades que los tráficos del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT). Lo único que no pueden hacer es atender colisiones.
De acuerdo con Óscar Araya, subdirector de la Escuela de Capacitación de la Dirección Nacional de la Policía de Tránsito, el objetivo de la semana de práctica es que implementen los conocimientos que adquirieron en las 482 horas de entrenamiento.
"Ellos salen en las mañanas y en las tardes regresan a la Escuela, en conjunto se hace una reunión, se revisan las multas que realizaron y se retroalimentan", explicó Araya.
El 15 de enero de 2017 iniciará el curso para la siguiente promoción.
En los cantones. Contando el nuevo grupo, Heredia tendrá 12 policías municipales de tránsito para poner orden en sus calles. Los primeros iniciaron hace aproximadamente año y medio.
Para Mario Arias, director de la Policía Municipal de ese cantón, la experiencia hasta el momento ha sido "un éxito".
Ahí, los oficiales operan principalmente en los alrededores del Hospital San Vicente de Paúl, la Universidad Nacional (UNA) y el mercado central. Esos son los puntos más críticos de la ciudad, según Arias.
La Municipalidad de Heredia registra cerca de ¢14 millones o ¢15 millones mensuales en multas, monto del cual se deja el 40%, y le entrega el otro 60% al Consejo de Seguridad Vial (Cosevi).
En San José, la meta es que para el 2020 el 100% de los oficiales municipales se haya acreditado para fungir como tráficos. Los primeros empezaron hace tres meses, y para el 13 de setiembre serán 35.
"Las capacidades del país son limitadas y creemos que las municipalidades, como actores principales del ordenamiento urbano podríamos dar un enorme aporte para la calidad de vida y la seguridad", manifestó Marcelo Solano, jefe de la Policía Municipal de San José.
El funcionario informó de que al mes se hacen unas 1.000 multas, la mayoría por mal estacionamiento, ya que el objetivo principal es reducir los tiempos de circulación por la ciudad.
"A mí me parece muy importante, porque colaboramos con la Policía de Tránsito para que ellos puedan abarcar zonas fuera del casco central, del que nos encargamos nosotros", expresó el oficial Fernández.